MADRID 17 Ene. (OTR/PRESS) -
Aunque tuviera alguna razón Mariano Rajoy en sus objeciones contra el apoyo al Gobierno en la lucha antiterrorista, lo que no es admisible es esa negativa cerrada, un hecho que jamás se había producido en la historia de la democracia española y me parece que en ninguna otra historia de cualquier país que hubiera atravesado por circunstancias lejanamente parecidas. La oposición debe apoyar al Gobierno en esa lucha sin más historias y luego, ya desde dentro de ese apoyo, ofrecerle todas las críticas y todas las sugerencias que tenga por conveniente. Eso es lo obligado, lo leal y lo que la inmensa mayoría de los españoles exige. Eso es lo que el actual presidente hizo con el anterior Gobierno de Aznar, del que Rajoy fue vicepresidente. Bastante hizo Zapatero con reconocer el grave error de ignorar la verdadera disposición de ETA 24 horas antes del atentado de Barajas y con pasar por todas las inmensas descalificaciones del jefe de la oposición, probablemente desbordado por la extrema derecha de su partido, pues de otra manera me parece totalmente inexplicable.
Zapatero cuenta con el apoyo de todo el resto de las fuerzas políticas y, desde luego, con la inmensa mayoría de la sociedad y de las fuerzas sociales. Y eso a pesar de que nadie ignora que él y su Gobierno han cometido errores y torpezas en la administración del proceso de paz, como ha sido reconocido parcialmente por el propio presidente del Gobierno en el atroz pleno del Congreso de los Diputados. Zapatero se repondrá del golpe sufrido el 30 de diciembre, pero ya veremos si el PP y su líder van a ser capaces de corregir el gravísimo error cometido con su negativa de apoyo al Gobierno en un problema de Estado tan delicado como el terrorismo. El desenfrenado electoralismo de su actitud se les puede volver en contra en cuanto que los ciudadanos despejen cualquier duda sobre los móviles del comportamiento del primer partido de la oposición. Y en cuanto que entiendan en toda su dimensión la incalificable ausencia del PP en la manifestación de Madrid la tarde del pasado sábado. Nada de todo eso puede salirles gratis. El español es un pueblo maduro y sabio.
Pedro Calvo Hernando.