Operadoras móviles de Paraguay en guerra tras la expansión de Millicom

Uso Móvil
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 3 octubre 2012 11:08

ASUNCIÓN, 3 Oct. (Reuters/EP) -

Las principales operadoras de telefonía móvil de Paraguay están enfrentadas en una guerra por el control del espectro radioeléctrico para el desarrollo de redes 4G, que tiene al grupo sueco de telecomunicaciones Millicom en el centro de la tormenta.

Los rivales de Millicom en el pujante mercado acusan a la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) de haberlo beneficiado al aprobar una operación de compra que lo convirtió en un "súper operador" con acceso a lo que ninguno de sus competidores puede aspirar a tener.

La compañía sueca, que opera en el país bajo la marca Tigo, compró hace unos meses al grupo argentino Clarín la firma de televisión por cable e Internet Cablevisión por 150 millones de dólares (116,3 millones de euros), un negocio que incluyó los derechos de transmisión del fútbol local.

Con la operación, Tigo también tomó posesión de 50 megahercios (MHz) en la banda de 2500/2600 MHz destinada al desarrollo de la red LTE (Long Term Evolution), una de las principales plataformas para sustituir la actual red de transmisión de datos 3G. La transacción fue autorizada por Conatel a finales de agosto.

"Esto es un golpe a la competitividad. Lo que el regulador permite es contrario a los principios de libre competencia y va a generar una mayor concentración del poder dominante en manos de un solo grupo", dijo a Reuters Francisco Gutiérrez, gerente de la firma Personal, controlada por el grupo Telecom Argentina.

Al competir en TV de pago, Tigo podrá ofrecer paquetes a sus clientes que incluyan también telefonía y datos, además del fútbol.

"Tigo va a poder comercializar servicios que ningún otro operador puede y nadie va a poder competir con eso. El regulador debería trabajar de manera inmediata en medidas para atenuar las asimetrías", agregó Gutiérrez y comentó que una posible medida sería que Conatel reduzca el espectro asignado a su competidor.

Tigo compite en Paraguay con Personal; con Clarod de América Móvil; y con Vox, que pertenece a la telefónica estatal Copaco, pero es la firma que más clientes tiene con el 56 por ciento del mercado contra el 32 por ciento de Personal.

Personal, que ha invertido en promedio unos 25 millones de dólares (19,3 millones de euros) anuales los últimos cinco años, dijo que la decisión lo obliga a revisar su estrategia y que posiblemente va a generar la expulsión de operadores en un mercado pequeño pero lucrativo.

Según datos del Ministerio de Hacienda, las empresas de telefonía móvil facturaron unos 545 millones de dólares entre enero y julio del 2012, un monto un 20 por ciento mayor que en el del mismo período del año anterior. Las ventas del sector alcanzaron los 864 millones de dólares en todo el 2011.

AUTORIZACIÓN LEGAL

Tigo dijo que Cablevisión fue ofrecida públicamente a la venta, que todas las empresas tuvieron oportunidad para adquirirla y que Conatel agotó los procesos de evaluación legales para dar la autorización.

"Intentan impedir una situación absolutamente legítima y legal, salpicando al que se ponga en el camino (...) Tigo es líder del mercado paraguayo y mantener su liderazgo dependerá exclusivamente de sus aciertos", dijo la empresa en un espacio reservado en los diarios.

Tigo tiene previsto invertir unos 100 millones de dólares (77,4 millones de euros) en los próximos dos años para adecuar sus equipos, instalaciones y desarrollar proyectos ante el nuevo escenario, dijo a Reuters el gerente de relaciones institucionales de la firma, Carlos Díaz.

La compra de Cablevisión fue autorizada tras la llegada al poder del presidente Federico Franco, quien sustituyó al destituido Fernando Lugo a finales de junio.

Ni el presidente de Conatel ni miembros del directorio recientemente renovado estuvieron disponibles para responder a las preguntas. El conflicto se produce a pocas semanas de que entre en vigor el sistema de portabilidad numérica, que permite a los usuarios migrar de un operador a otro sin cambiar de número.