MADRID, 16 Jun. (EDIZIONES/Portaltic) -
¿Tu hijo menor forma parte del siete por ciento de usuarios que usan Tinder o maneja otro tipo de aplicaciones para ligar? Estas 'apps' pueden suponer muchos riesgos, por lo que el control y los consejos parentales son algo esencial.
Controlar el uso que un menor da a su teléfono móvil es algo complejo para los padres. En primer lugar, porque el niño tiene su derecho a la intimidad y no se debe vulnerar; en segundo, porque los jóvenes pueden ser lo suficientemente avispados para borrar ciertas cosas cuando su 'smartphone' puede estar en “peligro”.
Una de las cosas más difíciles de controlar por los padres es el acceso a determinadas aplicaciones, como son las 'apps' de contactos como Tinder, Badoo, Hot or Not, Grindr o Wapa. Aunque se piense de forma común que utilizar uno de estos 'softwares' es cosa de adultos, la realidad es que cada vez son más y más los menores que acuden a ellas para conocer a otras personas, buscar ligue/pareja o simplemente para sentirse deseados o atractivos, exponiéndose a muchos peligros que puede que no sepan identificar a tiempo.
Con la gran variedad popular de servicios para todos los gustos y colores, los adolescentes reciben estímulos constantes sobre su uso, ya sea por anuncios en Internet o en la televisión, o porque alguien de su círculo les informa sobre ello. Basta con hacer un registro rápido con el nombre, email, fecha de nacimiento y poco más para tener un perfil en cualquiera de las aplicaciones de ligar.
Justo en ese aspecto reside la principal polémica de estos servicios. Aunque normalmente están restringidos para mayores de 18 años, como es el caso de Badoo, es muy sencillo engañar al 'software' y decir que se es mayor de edad, ya que la única comprobación reside en la fecha de nacimiento o en la supuesta edad que se incluya.
Tinder, por ejemplo, ha permitido hasta ahora el acceso a mayores de 13 años, pero según ha anunciado la propia empresa esto es algo que cambiará en los próximos días para que deje de ser apto a los menores de edad. Los usuarios de entre 13 y 17 años representan aproximadamente el 7% del total de usuarios de la aplicación.
Hot or Not, otra de las 'apps' populares entre los adolescentes, permite que éstos se conecten en su aplicación, pero a cambio tienen acceso a menos funcionalidades y están al margen de los mayores de 18 para evitar problemas.
El funcionamiento de estas 'apps' para ligar es sencillo, pero peligroso. Los menores han de subir una foto – en ocasiones, para que la aplicación valide la cuenta; en general, para que otros contacten con ellos – y rellenar datos personales de su perfil. De esta manera, el resto de usuarios de la 'app' puede dar con ellos para juzgar su aspecto físico y/o entablar conversaciones privadas. Los menores no saben realmente con quién están hablando y los demás pueden aprovecharse de ello.
RIESGOS PARA LOS MENORES
Uno de los riesgos más importantes para los menores es que exponen su privacidad e intimidad en una aplicación y a desconocidos. Esto deriva a que mucha gente tiene acceso a su fotografía de perfil o a otras que los propios adolescentes envíen en los chats privados – las prácticas de 'sexting', envío de imágenes sexuales a otros, son algo muy habitual– y pueden usarla a placer, pero también a que otros juzguen al menor por su físico, lo cual puede llegar a acarrear problemas de autoestima o trastornos psicológicos.
Los desconocidos, tal y como indica la palabra, no son gente que el niño conozca y eso puede llegar a ser su peor perdición. En Internet mucha gente tiende a hacerse pasar por otra personapara conseguir cosas, con lo que el chaval puede estar confiando en alguien, proporcionándole su información personal, que no es quien dice ser y puede llegar a ser hasta peligrosa (por ejemplo, pederastas que busquen un acercamiento sexual con el niño/a).
El 'ciberbullying' también es algo que puede darse y ante lo cual hay que mantener los ojos muy abiertos. El hecho de que el adolescente se exponga a otros, les de información suya privada, puede acabar en casos de extorsiones, acoso, insultos, vejaciones y un sin fin de situaciones problemáticas más.
CONSEJOS PARA LOS PADRES
Para evitar todos esos riesgos, el quid de la cuestión no reside en prohibir al menor el uso del teléfono o estar controlando lo que hace con él o deja de hacer, sino más bien en concienciar del peligro de usar esas “redes sociales” y en mostrar cómo se deben utilizar de forma segura, tal y como indica Menores OSI, una iniciativa de la Oficina de Seguridad del Internauta de INCIBE.
Lo primero y más importante es mantener la calma cuando llegue a tus oídos que tu hijo utiliza una de esas aplicaciones – o, si lo crees adecuado, hablar del tema con tu hijo aunque no sepas si usa o no Tinder, Badoo o sucedáneos -. Si a un adolescente en plena “edad del pavo” se le dice que no puede hacer algo, lo más probable es que siga haciéndolo incluso en mayor medida que antes. Un error es decirle directamente que no puede usar la 'app' sin explicarle por qué, sin señalar que es un servicio, en general, para mayores de 18 años que entraña riesgos. En esta conversación, también es importante hacer reflexionar al adolescente sobre la necesidad de utilizar dicho software, si realmente le proporciona algo en la vida o si lo utiliza “porque es lo que los demás hacen”.
Si a pesar de todo el menor sigue empeñado en utilizar la 'app', tiene que entender que es vital que mantenga su privacidad y su intimidad a salvo por lo que pueda ocurrir. Nunca se sabe para qué van a utilizar sus fotografías o su información personal, así que cuanto menos proporcionen a los demás, mucho mejor. Asegúrate de que no dé a nadie información bancaria, correo electrónico, dirección, número de teléfono o sus redes sociales para evitar futuros acosos, entre otras cosas.
Siguiendo esa línea, es necesario recordar a los niños que no deben confiar en los que están al otro lado de la pantalla. Como ya se ha dicho, mucha gente se hace pasar por otra persona, por lo que tienen que tener mucho cuidado con qué le cuentan a la gente, siempre manteniendo las distancias.
Si tu hijo llega al punto de que va a quedar con alguien que ha conocido en esa plataforma, tiene que saber, desde el primer momento, que nunca debe ir solo a esas citas, bajo ningún concepto. Seguramente que no quiera que vayas con él, pero siempre pueden recurrir a un amigo o hermano para que les eche un cable en esa situación – hay quien cree que es mejor que vayan siempre al lado del niño y quien dice que deben mantener cierta distancia, vigilando como una persona externa para que el niño esté más cómodo; mientras que estén cerca y a una distancia de seguridad, es suficiente -. Además, nunca debe quedar en lugares cerrados, sino que tienen que ser lugares públicos en los que haya mucha gente, como podría ser una centro comercial o una zona muy transitable de la ciudad en la que se encuentren, siempre durante el día.
Una cosa que le debe quedar clara a tu hijo/a es que no debe hacer 'sexting' bajo ningún concepto ni acceder a chantajes. Que alguien tenga fotos de menores desnudos o en situaciones sexuales puede acarrear muchos problemas, tanto para la persona que los tiene como para el propio niño, ya que pueden llegar, incluso, a hacerle algún tipo de chantaje al que no sepa decir que no. Además, haz especial hincapié en que no haga nunca algo con lo que no esté a gusto o algo que no le guste.
Por último, si el menor está teniendo algún problema con otro usuario, no dudes en denunciarlo a la propia aplicación con el botón correspondiente – suele denominarse como “denunciar abuso” o algo parecido – y bloquea al usuario. Si la situación va a más y tiene algún tipo de información personal del niño (como la dirección, el centro donde estudia o fotografías privadas, por ejemplo), ponte directamente en contacto con la policía para llevar a cabo todas las medidas de seguridad necesarias.
