MADRID, 18 Abr. (EDIZIONES/Portaltic) -
Basta un número de teléfono móvil para poder hackear. Así lo han demostrado los hackers una vez más, sin importar cuántas precauciones se tomen o cuánto se proteja el teléfono móvil. Los hackers han utilizado el iPhone de un miembro del Congreso de Estados Unidos para demostrar que pueden escucharse las llamadas o leer los mensajes, entre otras cosas.
El hackeo se lleva a cabo a través de un servicio de intercambio de red conocido como sistema de señalización número 7 (SS7). Karsten Nohl, un hacker alemán, hizo la demostración en una conferencia de hacking de Berlín y mostró cómo se podía acceder a la grabación de llamadas, de mensajes y hasta rastrear la ubicación del teléfono móvil, incluso si el GPS estaba apagado. Ahora ha vuelto a hacerlo para el programa 60 minutos que emite la CBS.
Ted Lugar, dueño del teléfono móvil prestado para la demostración, ha explicado que "el año pasado, el presidente de los Estados Unidos me llamó a mi teléfono celular. Y discutimos algunas cuestiones que si los hackers estaban escuchando, sabrían la conversación telefónica. Y eso es enormemente preocupante”, según recoge 9to5mac.
Estados Unidos ya está dividido entre los que quieren que se pueda exigir a las compañías que faciliten los datos de usuarios y los que no. Según informó Reuters hace una semana, la administración de EEUU está divida en torno a un proyecto de ley que pretende que los organismos obtengan la información en caso de ser necesaria.
