MADRID, 9 Sep. (Portaltic) -
Windows 10 se actualizará en noviembre para
introducir algunos cambios, como es el caso de su apariencia. El nuevo
sistema operativo de Microsoft se lanzó el 29 de julio pero la compañía
sigue trabajando para mejorar uno de sus productos estrellas.
Su objetivo es modernizarlo y que los
usuarios se olviden de todo lo que lo puede relacionar con sistemas más antiguos
que no tuvieron éxito, como es el caso de Windows 8. Es por ello que ciertos
elementos de esas versiones desaparecerán de Windows 10 poco a poco.
Microsoft cree que su aspecto puede cambiar
todavía más y es por eso que veremos ciertos retoques en la interfaz y en
determinados iconos, según informa la web NeoWin.
También se apunta que los menús del sistema
operativo pasarán del blanco a tonos grises para que el usuario pueda
visualizarlos más fácilmente y todas las aplicaciones de la tienda de
Windows tendrán animaciones de cierre; Microsoft Edge también
traerá cambios y se optimizará en general todo el software.
Microsoft no ha confirmado ninguna de estos
cambios de los que se está hablando, pero los expertos aseguran que son cambios
lógicos que tarde o temprano hará la comapañía. La primera actualización de
Windows 10 se espera para el mes de noviembre.