Santander se adhiere al código de buenas prácticas contra los desahucios

 Emilio Botín
Foto: EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 14 marzo 2012 12:41

MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

   Banco Santander se ha adherido al código de buenas prácticas aprobado por el Gobierno el viernes pasado dentro de su plan para minimizar el impacto social de los desahucios, informó la entidad que preside Emilio Botín.

   Santander es la primera entidad que formalmente anuncia su adhesión voluntaria a dicho código con el fin de aliviar la situación económica y social de las familias que se encuentran dentro del denominado umbral de exclusión.

   Adicionalmente, el banco mantiene la iniciativa que lanzó en julio del año pasado de otorgar una moratoria del pago de capital durante tres años, sin modificar las condiciones financieras y permitiendo el alargamiento del plazo, a aquellas familias que hayan visto reducidos sus ingresos o en las que uno de los miembros esté en paro.

   Estos límites se están aplicando con flexibilidad y el banco facilita estas ventajas a todos los clientes con hipoteca que cumplan estos requisitos, destacó la entidad cántabra.

MORATORIA HIPOTECARIA PARA 9.820 FAMILIAS.

   La moratoria hipotecaria de Banco Santander ha beneficiado ya a 9.820 familias por un importe total de 1.634 millones de euros. Como consecuencia, las cuotas mensuales de su hipoteca se han rebajado en media un 48%, especificó.

   El código de buenas prácticas establece un esquema para reestructurar la deuda hipotecaria de aquellas familias que se encuentren en situación económica extrema y no puedan hacer frente al pago de la hipoteca de su vivienda habitual.

   Esta medida afecta, en concreto, a aquellas familias que tengan en paro a todos los miembros que convivan en la misma vivienda y cuya cuota hipotecaria sea superior al 60% de los ingresos netos percibidos por los miembros de la unidad familiar que conviven en el mismo hogar.

   Para beneficiarse de las medidas que contempla dicho código es necesario cumplir otros requisitos, como no tener otros bienes o derechos patrimoniales con los que hacer frente a la deuda.

   El código de buenas prácticas contempla tres fases de actuación, la reestructuración de la deuda para que sea viable el pago de la deuda hipotecaria, y si la cuota resultante a pagar fuera superior al 60% de los ingresos con que cuenta la unidad familiar, las entidades podrían asumir una quita de parte del capital pendiente de pago.

   Si aun así la familia no puede hacer frente al pago de la cuota, se establece la dación de la vivienda como forma de cancelación de la deuda con el banco, si bien dicha familia podrá continuar habitando la vivienda en régimen de alquiler por dos años.