Greenpeace exige a José Blanco y a Capitanía Marítima una investigación del vertido en Huelva y sanciones a los autores

Actualizado: martes, 4 agosto 2009 17:05

MADRID, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -

La organización ecologista Greenpeace envió hoy una carta al ministro de Fomento, José Blanco, en la que le exigen una investigación "lo antes posible" para depurar responsabilidades y sancionar a los culpables del vertido producido el jueves pasado en las instalaciones de CEPSA en la provincia de Huelva, y que afecta ya a las playas de Huelva y Cádiz además de al Parque Nacional de Doñana.

Además, también envió otra misiva al Capitán Marítimo de Huelva para solicitarle que considere a los ecologistas interesados y comparecidos en el expediente correspondiente, con el objetivo de iniciar las acciones legales pertinentes. "Todas las operaciones de descontaminación tendrán que ser costeadas por la empresa responsable del accidente, a la espera de las sanciones correspondientes, dado el reiterado historial de vertidos con los que cuenta la empresa en Huelva", indicó el responsable de la campaña Contaminación de Greenpeace, Julio Barea.

Según Greenpeace, el nuevo vertido al mar de 30 toneladas de hidrocarburo (según la subdelegación del Gobierno en Huelva) se debe a las operaciones de descarga del buque SCF Caucasus en la refinería de CEPSA en Palos de la Frontera (Huelva). Así, señala que el vertido afecta a más de 15 kilómetros de costas y alcanza a parajes de alto valor ecológico, como el Parque Nacional de Doñana e insiste en que a pesar de las tareas de limpieza y el uso en alta mar de productos dispersantes es posible que sigan llegando manchas de combustible a las costas durante los próximos días.

A falta de la evaluación de los daños ambientales del vertido sobre la fauna y flora de la zona, así como los económicos sobre el turismo y las pesquerías de la zona, la ONG denuncia que ni la Junta de Andalucía ni la subdelegación del Gobierno en Huelva han aclarado aún qué tipo de hidrocarburo es el que se ha vertido, cuánto se ha recogido en alta mar ni cuánto ha llegado a las costas.

Finalmente, insiste en que en casos como el vertido de CEPSA no sólo se debe esperar a recoger hidrocarburos en las playas, sino que deben primar las operaciones de limpieza en alta mar para evitar que el combustible se hunda por la acción de los productos químicos empleados para disolver la mancha y termine afectando a los ecosistemas marinos o llegue a la costa.