Ingenieros, académicos, agricultores y cazadores insisten en que es "imprescincible" cazar para evitar daños por fauna

Jabalí, monte, caza, bosque.
Jabalí, monte, caza, bosque. - XUNTA - Archivo

   MADRID, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -

   Colectivos relacionados con el mundo rural, desde ingenieros, agricultores y cazadores han remitido un escrito al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en el que insisten en que es "imprescincible" realizar acciones de control de fauna durante el estado de alarma para evitar daños a explotaciones.

   Además, estas entidades cargan contra las organizaciones ecologistas a las que acusan de "enorme irresponsabilidad" por el escrito que lanzaron hace unos días para tratar de impedir los controles de población, en contra del criterio del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

   Así, los colectivos que piden acometer estos controles a través de la caza han suscrito este lunes el informe técnico 'La importancia del control de fauna cinegética durante el estado de alarma', realizado por un grupo de 17 científicos y expertos.

   Apoyan la petición la Asociación de Jóvenes Agricultores (ASAJA), Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Federación Española de Asociaciones de Ganado Selecto (FEAGAS), Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España (COSE), Federación Española de la Dehesa (FEDEHESA), Colegio Oficial de Ingenieros de Montes, Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Centro y Canarias, Real Federación Española de Caza (RFEC), Fundación Artemisan.

   Asimismo respaldan el informe por considera que en la actualidad no hay una alternativa viable al control de poblaciones por parte del sector cinegético, la Asociación Interprofesional del Ovino y Caprino de Carne (INTEROVIC), Asociación Interprofesional del Cerdo Ibérico (ASICI), Asociación Interprofesional de la Carne de Caza (ASICCAZA) y Asociación Española de Productores de Vacuno de Carne (ASOPROVAC).

   El documento avala la posibilidad de efectuar el control de poblaciones cinegéticas durante el estado de alarma en aquellos casos en los que se estén produciendo daños a la agricultura o a la ganadería y cumpliendo las normas de prevención sanitaria imprescindibles en estos momentos.

   El estudio afirma que los animales salvajes provocan cada año entre 8.000 y 10.000 siniestros agrícolas en España.

   A su juicio la postura del sector ecologista "muestra una vez más su profundo desconocimiento de la realidad del mundo rural" y tiene el "único objetivo de atacar con demagogia al sectro de la caza", aún a costa de provocar un "daño incalculable a miles de productores de toda España".

   En ese sentido advierten de la "enorme irresponsabilidad" de consecuencias "incalculables" para el campo que cometerían las autoridades si atienden la petición de las ONG.

   Además, defienden que en la situación actual el sector primario es aún "más relevante" porque garantiza el abastecimiento de alimentos a los ciudadanos, mientras otros, desde sus despachos, les niegan incluso la posibilidad de proteger sus cultivos y reses.

   Las organizaciones critican también que los ecologistas hablan en términos generales pero no plantean ninguna propuesta concreta, ni explican cuánto va a costar ni cómo ni cuándo lo llevarían a cabo.

   Por eso, los representantes del mundo rural afirman que no se está hablando de daños futuros ni hipotéticos, sino que es algo real ya que hay explotaciones con viñedos, cultivos leñosos, cereal, entre otros "arrasados por conejos, jabalíes o ciervos" y corderos atacados por jabalíes y zorros, con una "situación de máxima alerta de sanidad animal en muchas ganaderías".

   El manifiesto afirma que la caza es "una herramienta clave" porque se usa para baja y recuerda que no se trata de cazar sino de "ponerse al servicio de la administración para llevar a cabo acciones de gestión que consisten en el control de algunas poblaciones de ciertas especies".

   De hecho, recuerda que es necesario contar con autorizaciones expresas ya que solo se haría "en casos concertos" y cumpliendo con las normas sanitarias impuestas.

   Por otro lado, el informe se refiere no solo a los daños en explotaciones sino a los accidentes de tráfico, casi 9.000 año, a la persistencia de enfermedades de gran relevancia para la Sanidad Pública animal y daños a los ecosistemas.

   El manifiesto remitido a los dos Ministerios señala que agricultores, ganaderos y agentes del sector forestal han alertado de daños a cultivos por especies cinegéticas que tambien se están avistando en vías de comunicación y núcleos urbanos.

   Firman el informe investigadores, catedráticos y doctores del CSIC y de las Universidades de Córdoba, Politécnica de Madrid, de Extremadura, de Santiago; de Lérida; de León; de Valladolid, entre las instituciones académcias y el director de investigación de Fundación Artemisan, Carlos Sánchez García-Abad.