VITORIA, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El grupo del PNV en las Juntas Generales de Alava exigió hoy de nuevo el cierre de la central nuclear de Santa María de Garoña, "máxime" cuando en fechas recientes la central burgalesa se ha visto obligada a hacer un paro ante "potenciales problemas de su sistema de refrigeración, problemas climatológicos que no debemos asumir como excepcionales o puntuales".
A través de un comunicado, el grupo nacionalista insistió en que, "desgraciadamente, el tiempo carga de argumentos y razones a todos aquellos que rechazamos sistemáticamente la prórroga de la central nuclear". "Es una central antigua, por lo que sus mecanismos de funcionamiento también son antiguos. Llevamos años pidiendo su cierre y un plan de revitalización económica y social de la zona, pero la respuesta que recibimos son promesas que no ven la luz", denunció el procurador de PNV, Claudio Rodríguez.
Según explicó, la planta, en funcionamiento desde 1972, es una central nuclear "vieja", salpicada de "constantes incidentes" y con una "degradación propia de su antigüedad", que produce una "honda inquietud porque su sistema de seguridad está plagado de grietas". "Es conocido que la vida media de una central nuclear de este tipo es de 25 años, sin embargo, Garoña lleva 34 años de funcionamiento", matizaron.
El procurador nacionalista recordó que las Juntas Generales de Alava y las diferentes instituciones alavesas se han posicionado en numerosas ocasiones a favor de su cierre. "Como se recordará, Garoña tiene licencia, en prórroga, para funcionar hasta el año 2009, pero ahora, con la nueva petición de prórroga en el aire, pretende estar en funcionamiento hasta el año 2019", apuntaron.
A su juicio, esta situación "iría en contra de numerosos estudios que aconsejan no sobrepasar los 40 años de funcionamiento", además de que Garoña "no tiene capacidad de almacenar los residuos que genera", concluyó el procurador.
