Bruselas recuerda a Italia y Francia que cualquier revisión de Schengen pasa por un acuerdo de sus miembros

Actualizado: miércoles, 27 abril 2011 16:25

BRUSELAS, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea ha recordado este miércoles a Francia e Italia que cualquier revisión del Acuerdo de Schengen que permite la libre circulación de personas requiere una discusión previa y apoyo de todos los países que forman la Europa sin fronteras, después de que el martes Nicolas Sarkozy y Silvio Berlusconi remitieran una carta a la UE para reclamar la reforma del acuerdo y el refuerzo de la Agencia Europea de Fronteras (FRONTEX).

La misiva, que fue remitida al presidente del Ejecutivo comunitario, Jose Manuel Durao Barroso, y al presidente permanente del Consejo, Herman Van Rompuy, está en línea con lo defendido por Bruselas en los últimos años respecto a la necesidad de aclarar algunas normas y dotar de recursos propios a FRONTEX, según ha defendido este miércoles en rueda de prensa un portavoz comunitario, Olivier Bailly.

El portavoz ha rechazado que la propuesta franco-italiana pretenda "imponer soluciones" dictadas por Roma o París, sino que señala "puntos en los que hay que avanzar" para una mejor gestión de los flujos migratorios. Se trata de un asunto que "necesita una respuesta europea", ha dicho Bailly, y la carta va "en la buena dirección".

Barroso contestará "en los próximos días" a Berlusconi y Sarkozy, antes de que el 4 de mayo el Ejecutivo comunitario presente sus ideas para "aclarar" las normas Schengen. Este martes, al tiempo que Sarkozy y Berlusconi pedían más solidaridad de sus vecinos del norte y apostaban por una reforma de Schengen, Bruselas aceptaba la necesidad de "aclarar" cómo interpretar algunos artículos del Tratado, pero rechazaba que se fuera a producir ninguna "revolución".

Este miércoles, preguntado por la posición de Sarkozy y Berlusconi, Bailly ha dejado claro que no se trata de poner en duda el futuro del acuerdo Schengen sino reflexionar sobre el modo de "aplicar más correcta y fácilmente las reglas", así como de alentar el "espíritu de mayor cooperación" entre los países.

Bruselas ve "positivo" que tras semanas de tensiones Italia y Francia hayan encontrado un "punto de entendimiento" y "restablecido" la "confianza mutua y la voluntad de colaborar".

"No hay en esa carta voluntad de imponer soluciones francesas o italianas (...). Las respuestas concretas pasan por (una discusión a) nivel europeo", ha insistido el portavoz. "La necesidad de aclarar las reglas Schengen pasa por una discusión entre los Estados miembros de Schengen y, por tanto, estos dos estados no pueden por sí solos cambiar las reglas comunes de la familia europea", ha zanjado.

La Comisión prevé presentar el próximo 4 de mayo sus propuestas para mejorar la gestión de los flujos migratorios que llegan a la Unión Europea y para impulsar una mayor colaboración entre los países de la UE y para con países terceros. La experiencia de la UE en presión migratoria a través de los casos de la isla de Lampedusa (Italia) o el archipiélago de Canarias apuntan la "necesidad de revisar" algunas reglas, ha señalado Bailly.