En los primeros cinco meses de 2009 ha atendido a las mismas personas que en todo 2007
BARCELONA, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
Càritas atendió en 2008 a 45.058 personas en Barcelona y su área metropolitana, un 66% más que el año anterior, mientras que en los cinco primeros meses de este año ya ha atendido a las mismas personas que en todo 2007, 31.000 usuarios, según consta en la Memoria 2008 que hoy presentó el director de la organización, Jordi Roglà.
El aumento de personas que acuden a las diocesis de Barcelona, Sant Feliu de Llobregat y Terrassa no ha parado de aumentar desde 2004, pero mientras el crecimiento era "relativo", entre 2007 y 2008 "se ha disparado", explicó la encargada de gestión social de la entidad, Mercè Darnell. Las listas de espera tienen entre 1.500 y 2.500 personas, según el mes, y la espera para acceder a las ayudas es de entre tres y cinco semanas.
Una de las áreas donde se ha registrado un mayor aumento es en la de infancia, ya que el año pasado se atendieron a un 124% más de niños, y uno de cada cinco menores catalanes vive por debajo del umbral de la pobreza.
También ha crecido el número de usuarios nacidos en España, que alcanza ya el 31% --más del doble que en 2007--, a pesar de que los extranjeros continúan siendo mayoritarios, y dentro de este colectivo destacan los magrebíes (29%) y los suramericanos (26%). Las mujeres continúan siendo mayoritarias (53%) y las familias monoparentales ya son el 14% de los atendidos.
Los principales perfiles son familias que realquilan habitaciones con precios "abusivos", inmigrantes sin trabajo, menores que pasan muchas horas sin sus padres, extranjeras que buscan trabajo porque sus maridos están en paro y que antes no lo habían necesitado, ancianos con dependencia, 'sin techo' y enfermos mentales.
Entre ellos destacan familias, tanto españolas como extranjeras, que habían necesitado ayuda de Càritas pero que ya estaban reinsertados y que ahora vuelven a pedir ayuda y surgen otras que nunca antes habían acudido a los servicios sociales --el 40% de los atendido en 2009 no había acudido nunca a Càritas--.
EL PROBLEMA DE LA VIVIENDA
Roglà destacó la existencia de un nuevo perfil, aunque aún no muy destacado en cifras, de personas que tienen unos ingresos mensuales de entre 1.600 y 1.800 euros y que piden ayuda para comer porque tienen que destinar sus ingresos a pagar las hipotecas de sus pisos. "No es una situación de pobreza pero sí de riesgo", resaltó.
La vivienda continúa concentrando la mayor parte de los 1,5 millones de ayudas económicas que invirtió la entidad en 2008 --en 2007 fueron 900.000 euros--. Así, el 56% se destinó a este ámbito, seguido del 16% a alimentación, el 12% a gastos escolares, el 2% a transporte y la misma cantidad a salud, entre otros.
Càritas había construido hasta 2007 92 viviendas sociales, en convenio con el Ayuntamiento de Barcelona, y prevé alcanzar los 146 hasta 2011, con los que prevé atender a 700 personas. También se están dando una pensión a entre 100 y 125 ancianos cuyas pensiones están por debajo del umbral de la pobreza y con el objetivo de que lleguen a ese mínimo.
Roglà también anunció la creación de un proyecto de becas para fomentar la ocupación, ya que el 72% de las personas en edad laboral que pidieron ayuda a Càritas este año están en el paro. Para hacer frente a toda esta situación, la entidad cuenta con un presupuesto de 17,5 millones para este año, 14 de gasto ordinario y 3,5 de extraordinario, aunque prevén que no sea suficiente.
El director de Càritas reclamó a la Generalitat que "tome la batuta" ante esta situación y lidere acciones, que no tienen porqué ser sólo económicas sino también reformas legales por ejemplo para evitar la desregularización de inmigrantes, y a conseguir una mayor coordinación entre todos los agentes.
