SANTANDER, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil ha propuesto al Ministro de Interior a la comisaria Pilar Allúe como nueva jefa superior de Policía de Cantabria. Allúe, quien en su día fue también la primera mujer que ascendió a la categoría de Comisario, se convertiría así en la primera jefa superior del Cuerpo Nacional de Policía.
La Dirección General ha propuesto además al comisario Carlos Rubio, actual jefe superior de Cantabria, como jefe superior de Policía de Valencia, ya que Alejandro Valle, su titular hasta el momento, pasará en breve a desempeñar nuevas funciones en el departamento del director adjunto operativo.
La Jefatura Superior de Policía de Melilla también experimentará cambios ya que su actual jefe, Florentino Villabona, cesa en su cargo para trabajar en otras actividades ajenas a la policía. Juan Manuel Calleja Menéndez, actual responsable de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid ocupará su puesto.
PILAR ALLÚE, PIONERA
La valenciana Pilar Allúe ingresó en 1980 en el entonces Cuerpo Superior de Policía y su primer destino como inspectora fue en el Grupo Local de Información de la Comisaría de Hospitalet de Llobregat. En 1983 regresó a su tierra natal para desempeñar funciones en la Brigada de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Valencia.
En 1989 se hizo cargo de la Comisaría de Atención a la Mujer hasta su ascenso a la categoría de inspector jefe, momento en el que retomó su labor en Policía Judicial, concretamente en el Grupo de Robos y, poco después, como jefa del Grupo Operativo de Delincuencia urbana.
En 1997 asciende a la categoría de Comisario. Pilar Allúe se convierte así en la primera mujer que ocupa un puesto de esta responsabilidad en el Cuerpo Nacional de Policía. Tras dos años en Palma de Mallorca, la comisaria regresa a la Jefatura Superior de Policía de Valencia donde ha desempeñado distintos puestos. Actualmente es la Jefa de la Unidad de Coordinación Operativa Territorial.
Pilar Allúe es Licenciada en Geografía e Historia y Diplomada Superior en Criminología. Ha realizado diversos cursos relacionados con la violencia de género, la lucha antiterrorista, la delincuencia juvenil o el tráfico de estupefacientes y psicotrópicos, entre otros muchos.
Además, cuenta en su historial con 75 felicitaciones públicas concedidas por su participación en distintas operaciones policiales y tres Cruces al Mérito Policial con distintivo Blanco, la última otorgada este mismo año. En 1999 recibió el Premio 'Isabel Ferrer' creado por la Generalitat Valenciana.
CARLOS RUBIO
El leonés Carlos Rubio ingresó en el Cuerpo General de Policía en 1978 y su primer destino fue la Jefatura Superior de Policía de Cataluña donde ha desarrollado importantes actuaciones en los Grupos de carteristas, atracos, estupefacientes y delincuencia internacional.
En 1989 fue nombrado jefe del Grupo de Delincuencia Organizada, donde ha permanecido hasta 1994, año en el que se hizo cargo de la Sección de Crimen Organizado, ya como Inspector Jefe.
En 1999 accede a la categoría de Comisario y es nombrado Coordinador Regional de las Unidades de Droga y Crimen Organizado de Cataluña. Poco después, asume la jefatura de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Barcelona y en 2003 es nombrado Inspector Regional de Servicios de esa Jefatura. Desde enero de 2005 está al cargo de la Jefatura Superior de Policía de Cantabria.
Carlos Rubio tiene el título de Jefe de Seguridad Privada y ha realizado numerosos cursos sobre tráfico de estupefacientes, delincuencia económica, crimen organizado y negociador en incidentes críticos.
En su historial policial cuenta con más de 250 felicitaciones públicas, tres cruces al Mérito Policial con distintivo Rojo, una con Distintivo Blanco y otras condecoraciones concedidas por la Guardia Civil, la Guardia Urbana de Barcelona y las Policías Locales de Cantabria.
Entre sus actuaciones policiales más brillantes, a lo largo de su dilatada carrera profesional, destaca su participación en la investigación y resolución del secuestro del jugador de fútbol Quini (1981), la detención de la banda de atracadores que liberó al preso Rafael Bueno Latorre (1983).
También integró el equipo negociador que puso fin al atraco con rehenes en una sucursal del Banco de Sabadell de Barcelona en 1986, participó en la detención del secuestrador y asesino del hijo de un empresario barcelonés en 1989, dirigió la negociación que permitió la liberación de los pasajeros del vuelo de la compañía Air Marroc que fue secuestrado en agosto de 1999, o la liberación de 20 niños que habían sido secuestrados en su colegio de Hospitalet en 2002, entre otras muchas operaciones.
