MADRID 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
Expertos en teología han valorado positivamente que el nuevo Papa Francisco I no sea europeo y han señalado que el hecho de que sea latinoamericano supondrá "una renovación" para la Iglesia.
Así, Juan Luis Lorda, teólogo de la Universidad de Navarra, ha destacado que se trata de un hombre "completamente distinto" a Benedicto XVI, ya que mientras que el anterior Pontífice era "un estudioso" acostumbrado a "tratar con un círculo pequeño de personas", Franciso I es un religioso "es un hombre habituado al trato pastoral, al trato con los sacerdotes". No obstante, ha señalado que ambos comparten que "aman a la Iglesia" y su visión de que eso "es lo más importante".
Lorda se ha mostrado también convencido de que el hecho de tratarse de un religioso Latinoamericano "es una cosa que ha pesado" en la decisión. "Es el momento de América, de la evangelización", ha señalado Lorda, quien ha destacado que se trata de "un continente con muchísima vida religiosa" y "un mundo en expansión".
En este sentido, Martínez de la Hoz, ha señalado que este nombramiento es un momento "de gran alegría" para el mundo hispano y ha destacado que se produce "cinco siglos y pico después de que la fe fuera llevada a América". A su juicio, este hecho es "ver como esa semilla de la evangelización, al cabo de los años, produce un Papa".
Además, ha señalado que su labor en Buenos Aires, una "ciudad inmensa con muchos problemas", que "ha atravesado y atraviesa una crisis económica y muchos problemas", demuestra que el nuevo Papa es "avezado y está preparado en la tarea de la Iglesia de estar al lado de las personas que sufren y de las personas necesitadas".
El exprofesor de Derecho Matrimonial Canónico de la Pontificia Universitá della Santa Croce (Roma), Joan Carreras, ha calificado también de "muy interesante" la procedencia de Latinoamérica del Pontífice. En su opinión, un hecho tan relevante "supondrá una gran atención hacia la Iglesia de los países del continente americano".
Carreras ha resaltado lo "inesperado" del nombramiento de Jorge Mario Bergoglio. "El mismo lo ha dicho en sus palabras desde el balcón del Vaticano al asegurar que sus hermanos los obispos han ido a buscarle casi al final del mundo", ha indicado.
Por su parte, el profesor titular de Derecho Eclesiástico del Estado de la Universidad Complutense, Rafael Palomino, ha calificado de "curiosas" las características que reúne el nuevo Pontífice al ser una persona de procedencia latinoamericana, con experiencia italiana al haber trabajado en la Curia, y jesuita.
"Se venía hablando de la circunstancia de que siendo el español la lengua predominante en la Iglesia Católica no hubiese habido hasta ahora un Papa de esa procedencia", ha manifestado Palomino.
Del mismo modo se ha expresado la catedrática de Derecho Eclesiástico del Estado, Ana Vega, que ha resaltado que el hecho de no ser italiano y europeo es "bueno", debido a una necesaria renovación en la curia en su "estilo de trabajo, más ágil y transparente". "El hecho de ser latinoamericano trae una riqueza en empuje de la que podría carecer una Europa un poco cansada, escéptica e incluso descreída", ha afirmado.
JESUITAS, UNA ORDEN "ROMPEDORA"
También ha destacado que la elección de un jesuita puede suponer un cambio en la Iglesia, ya que es una orden considerada como "rompedora" por varios expertos. Además, considera que la elección del nombre Francisco I apunta "mucho a una sensibilidad hacia problemas sociales, la pobreza, lo que puede resultar especialmente cercano".
En este sentido, Carreras ha admitido que puede influir en el Pontificado pero "de una manera espiritual".
Por el contrario, para Palomino, aunque la elección de un jesuita le resulta un hecho "sorprendente", se ha mostrado convencido de que "marcará su vida personal" pero "no repercutirá necesariamente en su Pontificado".
LA EDAD NO ES UN PROBLEMA
En cuanto a la edad del pontífice, Vega ha descartado que haya supuesto un obstáculo a la hora de ser elegido por los cardenales. "Esta elección demuestra que todas las quinielas se caen al suelo, porque los criterios de los cardenales responden a un equilibrio entre la continuidad y afrontar los nuevos retos de la Iglesia", ha señalado.
Martínez de la Hoz también ha indicado que "la mayor parte de los cardenales del cónclave son mayores de 70 años y se consideran jóvenes". "Quizás ha primado que está bien de cabeza y está en forma y tiene mucha preparación", ha apuntado y ha añadido que Bergoglio "puede llevar a cabo un papado de 10 años o más, lo que la cabeza le dé".
Para Palomino la elección de un papa de 76 años "demuestra que los cónclaves arrojan resultados muy difíciles de prever".
Finalmente, Lorda ha indicado que la edad de Francisco I es "un poco sorprendente", porque es más "avanzada de lo que se esperaba", aunque ha indicado que el hecho de que tenga 76 años no tiene por qué influir en su ejercicio porque el Papa se dedica a "cuestiones espirutuales" y para otras cuestiones "de gestión" puede rodearse de personas que le ayuden.