MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
El director de la Oficina de Información de la Conferencia Episcopal, Isidro Catela Marcos, afirmó que los obispos españoles "independientemente de la coyuntura social y política" se han pronunciado en contra del aborto y volvió a pedir a los parlamentarios católicos del Grupo Socialista que sean "coherentes" con sus ideas y voten en contra de la Ley del Aborto.
En este sentido, Catela recordó que la Conferencia Episcopal en su momento emitió "varias declaraciones denunciando" la decisión del Gobierno de José María Aznar de autorizar la píldora abortiva, ya que entendía que suponía una "injusticia facilitar un medio más para violar el derecho a la vida".
"Entonces, sí hubo reacciones episcopales, distintas en grado y matices de las actuales, porque en justicia no se puede responder igual ante situaciones que son objetivamente desiguales", reconoce el representante de la Conferencia Episcopal en una tribuna publicada en el periódico 'El Mundo' y recogida por Europa Press.
Así, afirma que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "da un salto cualitativo hacia atrás en la protección del derecho a la vida con una nueva ley aún más injusta que la vigente" e insiste en que "los obispos españoles han recordado siempre que toda vida humana debe ser respetada como sagrada desde la concepción hasta la muerte natural".
Por ello, vuelve a pedir a los parlamentarios socialistas que se salten la disciplina de partido y voten en contra del proyecto de Ley del Aborto. Así, señala, citando a la 'Evangelium Vitae', que "leyes de este tipo no sólo no crean ninguna obligación de conciencia, sino que, por el contrario, establecen una grave y precisa obligación de oponerse a ellas mediante la objeción de conciencia".
Además, advierte a los socialistas de que "la introducción de legislaciones injustas pone con frecuencia a los hombres moralmente rectos ante difíciles problemas de conciencia" y les señala que "a veces las opciones que se imponen son dolorosas y pueden exigir el sacrificio de posiciones profesionales consolidadas o la renuncia a perspectivas legítimas de avance en la carrera".