Archivo - Niños jugando - Mahmoud Khattab/Quds Net News vi / DPA - Archivo
MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Escolar del Estado ha aprobado una declaración ante la gravedad de la situación en Gaza, en la que advierte de que "ningún niño, ninguna niña, ninguna persona debe ser privada de su derecho a la educación, a la protección, a la esperanza y, sobre todo, a la vida".
En el documento, al que ha tenido acceso Europa Press, lamenta que la situación en Gaza, "lejos de haberse solucionado, se ha visto agudizada con un número cada vez mayor de víctimas y el impedimento constante para que su población reciba ayuda humanitaria".
El Consejo Escolar del Estado reitera su compromiso con la defensa de los Derechos Humanos, los principios de la educación como bien común y como derecho fundamental de todas las personas.
Asimismo, expresa su apoyo al profesorado que, con responsabilidad y dedicación, ejerce las funciones encomendadas en la normativa vigente y respalda la libertad de cátedra, que la Constitución Española reconoce.
"Nadie puede impedir que el alumnado reciba una educación basada en la convivencia y la paz ni que el profesorado ejerza su función educadora y desarrolle plenamente el currículo escolar", señala.
Precisamente, el organismo recuerda que en el currículo oficial de todas las etapas educativas se incluye el conocimiento, valoración y respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales, así como la formación en el ejercicio de la ciudadanía democrática, cívica, participativa y en los valores que sustentan la convivencia y la cultura de la paz.
Esos principios se encuentran recogidos, asimismo, en los reales decretos de enseñanzas mínimas que establecen la educación para la justicia, la igualdad y la solidaridad como elementos esenciales del currículo que debe impartirse en todos los centros y en todas las etapas del sistema educativo español.
Haciéndose partícipe de lo manifestado por estudiantes, docentes, familias y demás agentes educativos, el Consejo Escolar del Estado traslada a toda la sociedad "su preocupación y rechazo por cualquier hecho violento, sea de la naturaleza que sea y máxime si es dirigido contra la infancia".
"Como representantes de la comunidad educativa, nos mueve el convencimiento de que la educación es la verdadera protección frente a la violencia, porque nos enseña a afrontar los conflictos, inevitables en toda convivencia, a través del diálogo, la justicia y la cooperación. Solo así es posible construir un futuro más justo y humano, basado en la cultura de la paz", concluye el organismo.