MURCIA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
Dos personas han sido imputadas como presuntos autores de delito de homicidio imprudente por la muerte de un buceador en 2010 por el disparo de un arpón cuando realizaba la inspección de la jaula de una piscifactoría de San Pedro del Pinatar (Murcia).
En el momento del suceso, los dos testigos presentes aseguraron que la muerte se había debido a causas accidentales cuando el propio buceador se colocaba el equipo para iniciar la inmersión. Sin embargo, los investigadores sospecharon del testimonio debido a las contradicciones, las evidencias encontradas en el interior del barco y el equipo de buceo, además de las lesiones del fallecido.
Tras la toma de nuevas manifestaciones, reconstrucciones judiciales de los hechos en galerías de tiro y en alta mar, informes forenses y periciales de los departamentos de balística e infografía del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil, los investigadores determinaron que el fallecimiento se produjo por un disparo de arpón realizado a cierta distancia y en el interior del agua, presumiblemente fortuito, por uno de sus compañeros.
De esta forma, y tras el análisis de los resultados obtenidos en las pruebas periciales, se procedió a imputar a dos personas por la presunta comisión de un delito de homicidio imprudente en un hecho que en un principio quedaba catalogado como accidente laboral. Los imputados son I.H.V., español, 58 de años, vecino de San Pedro del Pinatar y J.F.M.N., español, 37 de años, vecino de Murcia.