Ecologistas en Acción rechaza las certificaciones en la acuicultura de langostinos porque destruye ecosistemas costeros

Actualizado: jueves, 19 abril 2012 15:33

MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

La organización Ecologistas en Acción ha expresado su rechazo a la certificación de la acuicultura de langostinos, porque considera que no es más que un intento de legitimar una actividad que destruye las comunidades costeras y los ecosistemas en los países del Sur donde se producen los langostinos.

Así, la organización califica a estas certificaciones como el "maquillaje verde de la destrucción" en las zonas con acuicultura intensiva de langostinos en las zonas tropicales, cuya producción se destina casi en su totalidad a la exportación a los países del Norte.

En este contexto, explica que en las últimas décadas, gracias a los subsidios recibidos por los gobiernos, bancos públicos, agencias internacionales de desarrollo y corporaciones multinacionales, esta actividad ha avanzado en América Latina, Asia y África, como medio para alcanzar el crecimiento económico basado en las exportaciones de grandes volúmenes de mariscos, con la falsa idea de que su cultivo disminuiría la presión sobre las poblaciones marinas salvajes y reduciría la pobreza en los países del Sur donde se desarrolla esta industria.

Además, el "vertiginoso crecimiento" de la acuicultura intensiva de langostinos ha ido acompañado por una huella de explotación cada vez mayor de los recursos naturales, causando principalmente la degradación generalizada del manglar y otros ecosistemas costeros.

Ecolgistas en Acción sostiene que en las zonas donde está implantada esta industria, se ha registrado una "extensa transformación de las áreas costeras donde se realiza la acuicultura industrial de langostinos, generando impactos sociales, económicos y ambientales" y que pese a la desarticulación social y destrucción ambiental que suponen, la acuicultura de langostinos sigue expandiéndose.

En ese sentido, insiste en que esto continúa su expansión mediante estrategias como la certificación con el objetivo de reglamentar las nuevas prácticas para la producción industrial de langostinos.

A su juicio, esta certificación no ha demostrado cambio alguno en su "lógica degradante" de esta industria, ni en la relación de la "injusticia ambiental" establecida con los territorios y las poblaciones que viven del manglar. "Refutamos la certificación de esta actividad, pues tiene claros beneficios a favor de la degradación social y ambiental", ha apostillado.