La familia de Roca se embolsó unos 646.000 euros con cinco premios de lotería obtenidos en sólo seis meses

Actualizado: martes, 15 mayo 2007 16:39


MÁLAGA, 15 May. (EUROPA PRESS) -

La mujer y la hija del presunto cerebro de la trama de corrupción en el Ayuntamiento de Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, se embolsaron 646.033 euros a través de cinco premios de lotería obtenidos en "tan sólo" seis meses, según los investigadores. El instructor del caso 'Malaya', Miguel Ángel Torres, concluye que resulta "absolutamente improbable y contrario a las más elementales normas de la lógica" que una persona sea agraciada con tantos premios y en tantos lugares de España.

Así, la Policía explica que Roca "empleó a su propia familia para realizar operaciones de blanqueo", de forma que a través de loterías y juegos de azar "enmascaró" la presunta procedencia ilícita del dinero. El informe policial, incluido en la parte del sumario no declarada secreta desde ayer, al que tuvo acceso Europa Press, concreta que los familiares fueron agraciados con lotería nacional, cupones de la ONCE, quiniela y bonoloto "todo ello en seis meses escasos".

Los premios se ingresaron entre marzo y octubre de 2005 en cuentas a nombre de Rosa María Jimeno y María Roca Jimeno, esposa e hija, respectivamente del ex asesor de Urbanismo, imputadas ambas por un delito de blanqueo. La esposa señaló en su declaración en el juzgado que sabía que le había tocado a su marido varios premios, pero que desconocía por qué ingresaba el dinero en su cuenta y si había comprado cupones premiados; mientras que la hija dijo no saber nada de la cuenta ni de los premios, porque ella no juega.

Asimismo, tanto la Policía como el instructor destacan el papel del cuñado del ex asesor de Urbanismo, Antonio Jimeno, director de la sucursal en la que estaban las cuentas, en Los Alcázares; y que tenía "una bolsa de premios y premiados" a disposición de Roca. Es más, en una conversación entre ambos, el hermano de la mujer le dice que tiene "180.000 de la ONCE al 15%".

Tanto en su declaración como en la auditoría realizada por el banco, que lo despidió tras estos cobros por ser sujeto obligado a denunciar operaciones sospechosas de blanqueo, éste apuntó que era su cuñado el que le entregaba los boletos premiados y el que le decía que ingresara el dinero en las cuentas de su familia. Aunque al principio negó haberle facilitado cupones premiados, al escuchar la conversación admitió que "era la primera vez" que le ofrecía a su cuñado esta operación, que no se llegó a realizar.

La cuarta persona detenida al mismo tiempo fue Karin Marika Mattsson, persona de confianza de Roca, que para la Policía "adquiría los décimos premiados y los ingresaba". Ésta declaró que desconocía lo relativo a los premios, pero que creía recordar que una vez alguien, aunque no sabe quién, le entregó una bolsa de plástico para que se la diera al cuñado de Roca.

Por último, los investigadores precisan que "se puede establecer una conexión directa" entre las presuntas aportaciones de los promotores y constructores por operaciones presuntamente ilegales, reflejadas en la contabilidad de Roca y siendo por tanto "fondos ilícitos" con "el lavado posterior de esos fondos y su introducción en el circuito económico legal a través de la adquisición, previo pago del porcentaje correspondiente, de lotería y premios en juegos de azar".