MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha afirmado este jueves que el Ejecutivo central ha decidido "hacer política contra el Ayuntamiento" de la capital como estrategia electoral, de cuya efectividad ha dudado, y ha indicado que por eso "lanzó" a la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, contra el Consistorio esta semana, cuando criticó la situación del aire en la capital y pidió medidas al Gobierno local.
"Todo el mundo sabe que el Gobierno de España ha tomado una decisión clara: hacer política contra el Ayuntamiento de Madrid. Hace meses nos lanzó a la ministra de Economía, Elena Salgado; ahora a la de Medio Ambiente, y no sabemos cuál será el siguiente titular del Gobierno que entre en campaña electoral en Madrid", ha opinado durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
Además, aun a riesgo de resultar "cínico", ha considerado que ésta es "una estrategia equivocada" que llevará a los madrileños a "identificar al adversario del PP, no con el PSM, sino con el PSOE de (José Luis Rodríguez) Zapatero y de (Alfredo Pérez) Rubalcaba".
"Y cuanto más (pase eso), menos apoyo electoral van a tener. Creo que usar como elemento electoral a los miembros del Gobierno no le está haciendo un buen favor a (Jaime) Lissavetzky (candidato socialista a la Alcaldía de la capital)", ha apostillado.
Por otra parte, ha pedido al equipo de Zapatero que tenga "un mínimo de respeto" por la anterior ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, que fue quien en 2009 emitió un informe favorable al proyecto de modificación de la red de estaciones medidoras de la contaminación de la capital.
"No me parece razonable que porque sea época preelectoral la ministra desautorice a su predecesora. Tiene que haber un mínimo de respeto a la labor de los antecesores en política, sobre todo si son del mismo partido, y también una coherencia", ha señalado el regidor, recordando que "el estar en campaña preelectoral no permite al Gobierno socialista, una vez más e incluso desautorizando a su predecesora en el Ministerio, cargar contra el Ayuntamiento de Madrid", ha zanjado.
Además, ha eludido "ser cruel dando datos" sobre la contaminación en Córdoba durante los años en que Aguilar fue alcaldesa del municipio porque "no hay que mirar hacia atrás, sino hacia delante".
INCUMPLIMIENTOS DE ZAPATERO
Por otra parte, el primer edil ha acusado al Ejecutivo central de varios incumplimientos en materia medioambiental, como el no poner en marcha los "planes y programas para cumplir con la normativa comunitaria por contaminantes" o no crear el Sistema Español de Información, Vigilancia y Prevención de la Contaminación previsto en la Ley de Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera.
Además, tampoco ha implementado la Ley de Movilidad Sostenible, que está ordenada en una disposición transitoria de la Ley de Calidad del Aire y que "el Gobierno sigue incumpliendo su obligación de aprobarla", según ha recordado el edil.
Asimismo, ha vuelto a insistir en que la política central de subvenciones a los vehículos diésel es equivocada porque provoca un incremento del dióxido de nitrógeno (NO2), precisamente la sustancia que supera los niveles máximos permitidos.
"Tenemos un Gobierno que fiscalmente favorece los vehículos contaminantes", ha clamado, considerando "urgente una modificación de la política fiscal" relativa a impuestos como el de Hidrocarburos, que "grava un 40 por ciento más la gasolina", o el de Matriculación, que "sólo tiene en cuenta las emisiones de dióxido de carbono (CO2) pero no de NO2 o partículas en suspensión".
De hecho, este tipo de decisiones hacen que el Gobierno "esté antiguo", en opinión de Gallardón, ya que junto a los beneficios fiscales el Ejecutivo central también continúa dando ayudas directas a la compra de vehículos diésel.
A este respecto, ha reconocido no ser "partidario de retirar las subvenciones" en la actual situación de crisis, pero sí ha sugerido "dar incentivos a los combustibles menos contaminantes" como se hace en la capital con las exenciones en el pago del SER o del 'numerito' para coches híbridos y eléctricos.
"Las medidas tienen que ser en positivo. El Gobierno debería establecer incentivos para combustibles menos contaminantes que el diésel, para que los ciudadanos cambien paulatinamente el parque automovilístico. Las políticas medioambientales tienen que ir más por vía de estímulos que de penalizaciones", ha considerado.
MEJOR AIRE QUE NUNCA
En cualquier caso, ha defendido que Madrid tiene "la mejor calidad del aire que nunca en su historia" gracias a las medidas implementadas por el Ayuntamiento, tales como el fomento del transporte público, la renovación verde de la flota municipal, el soterramiento de la M-30, la creación de nuevas zonas peatonales o la extensión de la red de Metro, entre otras decisiones adoptadas por su equipo.
Según el alcalde, este tipo de políticas han permitido reducir todos los niveles de contaminantes en la capital desde 2003. Concretamente, ha apuntado que las PM10 no llegan a 30 microgramos por metro cúbico frente a los 35 de hace siete años (-15 por ciento, el límite son 40 mgr).
Por su parte, las PM2,5 están en 12,2 mgr, (-29,4 por ciento respecto a los 16 mgr.), cuando el límite es 25 mgr; el monóxido de carbono está en 0,36 mgr frente a los 0,62 mgr de hace siete años (-42 por ciento, con un límite de 10 mgr); el dióxido de azufre no llega a 10 mgr. Frente a los 12 mgr de 2003 (-18 por ciento, límite de 125 mgr.); y el benceno está en 0,74 mgr. (-36 por ciento respecto a 1,16 mgr. de 2003) cuando el límite son 5 microgramos.
De hecho, incluso el NO2 ha disminuido, de acuerdo con los datos aportados por el primer edil, ya que se ha pasado de 52 microgramos a 46 microgramos (-11,5 por ciento), aunque aún no se cumpla el límite establecido por la Unión Europea de 40 microgramos.
En cualquier caso, Gallardón ha recordado que el propio Ejecutivo comunitario preveía problemas en este punto, por lo que "estableció que se necesitaba una adaptación de las ciudades e (impuso) un periodo hasta 2015", con la posibilidad para las ciudades de pedir una moratoria a partir de este ejercicio, opción a la que se acogerá Madrid.
"Es decir, que las medidas del Ayuntamiento para mejorar la calidad del aire nos permiten decir que Madrid tiene la mejor calidad del aire que nunca en su historia desde que existen las mediciones. Y seguiremos implementando medidas en los próximos años, en las que necesitamos también una colaboración que en este momento no se produce del Gobierno de España", ha concluido.
En cualquier caso, ha asegurado que se seguirá trabajando para "resolver" los problemas que aún existen en esta materia, provocados en muchos casos por la llegada de más de un millón de vehículos diarios de otras localidades, sin perder con ello riqueza económica.
"Y no tengan duda de que ningún madrileño tendrá nunca una situación en la que se superen los niveles de riesgo de contaminación, porque si eso ocurriese todas las medidas previstas en la normativa, entre las cuales está limitar la incorporación de vehículos a la ciudad, se aplicarían", ha zanjado.