VALENCIA 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El arzobispo de Valencia, Agustín García-Gasco, quien fue hoy nombrado cardenal por parte del Papa Benedicto XVI, empezó sus estudios eclesiásticos en 1944, en el seminario diocesano de Madrid, y se diplomó, más tarde, en Sociología Industrial y Relaciones Humanas, y en Ciencias Empresariales y Técnicas de Grupos, según informaron fuentes del Arzobispado en un comunicado.
García-Gasco nació en la localidad toledana de Corral de Almaguer el 12 de febrero de 1931. Recibió la ordenación sacerdotal el 26 de mayo de 1956 y fue nombrado arzobispo de Valencia por el Papa Juan Pablo II el 24 de julio de 1992.
Tras ejercer como párroco en la localidad madrileña de Villamanta y ser nombrado delegado episcopal de Cáritas, fue designado por el entonces arzobispo de Madrid-Alcalá, Casimiro Morcillo, titular de la parroquia de Santísimo Cristo del Amor, en el barrio de Aluche, y, años después, en 1970, de la iglesia de Santiago y San Juan.
En 1977, García-Gasco, que había fundado también el Instituto de Teología a Distancia, fue nombrado vicario episcopal de la vicaría III de Madrid por el entonces cardenal arzobispo de Madrid, Vicente Enrique Tarancón; y el 20 de marzo de 1985, el Papa Juan Pablo II le designó obispo auxiliar de la archidiócesis de Madrid.
A su entrada en la Conferencia Episcopal Española fue nombrado vocal de la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis y, en abril de 1988, García-Gasco fue elegido secretario general de la propia Conferencia, miembro de su comité ejecutivo y de la comisión permanente.
El 24 de julio de 1992, Juan Pablo II nombró al arzobispo titular de la archidiócesis metropolitana de Valencia, puesto que permanecía vacante desde la muerte en accidente de carretera el 8 de enero de aquel mismo año de Miguel Roca Cabanellas.
Igualmente, fue designado por el Papa Juan Pablo II miembro del Pontificio Consejo para la Familia en 1992 y también de la Congregación del Culto Divino en 1999, cargos en los que fue ratificado por el actual pontífice, Benedicto XVI.
En enero de 2003, Juan Pablo II designó a Valencia como sede del V Encuentro Mundial de las Familias (EMF), que tuvo lugar en julio de 2006, y encomendó a García-Gasco la preparación del evento en colaboración con el Pontificio Consejo para la Familia.
Conforme a lo establecido en el canon 401 del Código de Derecho Canónico, García-Gasco presentó su renuncia al Papa como arzobispo de Valencia en febrero de 2006 tras cumplir la edad de 75 años, según fuentes del Arzobispado. El canon 401 establece, textualmente, que "al obispo diocesano que haya cumplido 75 años de edad se le ruega que presente la renuncia de su oficio al Sumo Pontífice, el cual proveerá teniendo en cuenta todas las circunstancias".