López Miras tilda de "inadmisible" que Sánchez cambie las reglas del TS sin escuchar a 2,5 millones de españoles

   MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -

   El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, ha calificado de "inadmisible" e "inaceptable" que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cambie las reglas del trasvase Tajo-Segura sin escuchar a los afectados, que calcula en unos 2,5 millones de españoles, no solo regantes, sino los ciudadanos que dependen de este agua para su consumo.

   López Miras ha viajado desde Murcia a Madrid para participar en la manifestación de los regantes de Alicante, Murcia y Almería frente el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico contra los cambios previstos por el Gobierno en los caudales ecológicos del Tajo y en las normas de explotación del trasvase Tajo-Segura.

   En declaraciones a los medios, el presidente murciano ha reclamado a Pedro Sánchez y "su" Gobierno que escuchen "el clamor de 2,5 millones de españoles" que viven en gran parte de la agricultura y que además necesitan el agua día a día en sus hogares.

   A su juicio, está "en riesgo" el futuro de miles y miles de familias de la Región de Murcia, Alicante y Almería, pero también el abastecimiento de agua que cada día llega a los hogares de 2,5 millones de españoles a través del trasvase Tajo-Segura.

   "Eso es lo que hoy está en juego", ha descrito López Miras para quien es "inadmisible" que el Gobierno tenga una hoja de ruta para "recortar y cerrar" el trasvase Tajo Segura sin escuchar, sentarse, dialogar ni hablar con los gobiernos de la región de Murcia, de Valencia en Andalucía, ni con los regantes ni los agricultores.

   Frente al Ministerio calificó también de "inadmisible" que la delegación del Gobierno retuviera inicialmente, durante cerca de dos horas, la marcha previamente autorizada de camiones, vehículos y tractores desde IFEMA hasta la sede ministerial.

   "Ahora mismo están secuestrados los manifestantes", denunció López Miras. No obstante, pese a que se retuvo la marcha, finalmente la Delegación del Gobierno de Madrid autorizó la comitiva, aunque limitó a 15 el número de camiones participantes frente a los 200 inicialmente previstos.