MADRID, 31 OCT. (EDIZIONES) -
Ser mujer e inventora no ha sido tarea fácil en España, tal y como reflejan los documentos oficiales: de las 10.087 patentes registradas a título individual entre 1882 y 1935 tan sólo 211 estaban a nombre de mujeres.
El control moral, la fuerza de la tradición, los tabúes y la falta de amparo legal han sido los principales obstáculos para las mujeres que hicieron historia en los tiempos en que para registrar una patente debían recurrir a sus maridos o hermanos, según la Oficina Española de Patentes y Marcas.
Desde europapress.es repasamos la trayectoria de algunas de las inventoras españolas más importantes:
FRANCISCA JAQUINET
La máquina de chimenea económica portátil podría considerarse la primera patente a nombre de una mujer en España, aunque su beneficiaria, Francisca Jaquinet, atribuía la invención del aparato a su difunto marido.
El privilegio concedido a Jaquinet en 1826 permitía la comercialización en exclusiva durante cinco años de una especie de estufa doméstica rudimentaria que "podía colocarse en cualquier lugar de la casa casi sin inconveniente".
Museo de la OEPM
FERMINA ORDUÑA
En 1865, Fermina Orduña registró a su nombre los derechos sobre un peculiar carromato para ordeñar y distribuir leche fresca a domicilio que obtuvo un privilegio industrial, lo que por entonces equivaldría a una patente.
Según los bocetos de Orduña, la vaca podía viajar dentro del vehículo, donde la leche sería extraída a través de un "ordeñador mecánico". Además, el artilugio incluía una caldera de agua caliente con un regulador de temperatura para mantener caliente el producto.
Museo de la OEPM
CARMEN FÁBREGAS
Carmen Fábregas, una profesora de música barcelonesa, patentó en 1878 un "dactílago capaz de educar los dedos en la enseñanza del piano". Pese a que no existe certeza sobre la funcionalidad de este misterioso artilugio, la concesión de su patente supone un hito para las mujeres inventoras, puesto que se abandona por primera vez el ámbito doméstico.
A partir de entonces, seguirán patentándose inventos femeninos de uso doméstico como el "lavadero mecánico para ropa" de la valenciana Elia Garci-Lara, pero a ellos se sumarán otros relacionados con la enseñanza, las ciencias, o la medicina, como por ejemplo un sistema de pesas creado por Concepción Aleixandre Ballester para corregir el descenso de la matriz en las mujeres.
Museo de la OEPM
Museo de la OEPM
MARÍA DEL CARMEN ORTIZ ARCE
La monja María del Carmen Ortiz, más conocida como Sor Perboire, diseñó y patentó en 1909 un aparato que permitía a las personas ciegas escribir en sistemas Braile y Llorens --un método de lectoescritura no tan popular como el primero-- y que facilitaba la comunicación entre invidentes y videntes.
La Regleta Sor, como se denominó al invento, consistía en un punzón de bronce que trazaba los caracteres sobre una superficie con relieve, creando textos perceptibles a la vista y al tacto. El Museo Tiflolófico de la Once de Madrid sigue conservando algunos de estos artefactos.
Museo Tiflolófico de la Once
ÁNGELA RUIZ ROBLES
Ángela Ruiz Robles inventó en 1949 la enciclopedia mecánica, un artilugio que incorporaba abecedarios automáticos en todos los idiomas con los que podían formarse palabras, frases, lecciones académicas y cualquier otro tipo de texto. Esta plataforma era capaz de iluminarse para leer en la oscuridad, podía emitir sonidos e, incluso, hacer zoom sobre las letras o dibujos, funciones impensables hasta la fecha.
La enciclopedia mecánica, a la que Google rindió homenaje el pasado año, era necesaria porque "aligera el peso de las carteras de los alumnos, hace más atractivo el aprendizaje y adapta la enseñanza al nivel de cada estudiante", según las explicaciones de su inventora. Pese a ello, ninguna empresa se animó a comercializarla.
Museo de la OEPM
CELIA SÁNCHEZ RAMOS
El legado de las inventoras españolas sigue vivo en la actualidad gracias a investigadoras como Celia Sánchez, que ha inventado 15 familias de patentes relacionadas con la neuroprotección de las retinas a través de elementos y dispositivos ópticos. Patentes entre las que destacan lentes y filtros oculares terapéuticos.
Sánchez ha recibido más de 20 galardones por su labor investigadora, entre los que destacan el premio a 'Mejor Inventora Internacional' otorgado por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, la medalla de oro a la mejor invención del área sanitaria, y el 'Gran Premio a la Mejor Invención Internacional' otorgado por la ONU.
Museo de la OEPM
