MADRID, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso del Vaticano, monseñor Miguel Ángel Ayuso, que participa desde este lunes en la 69 Semana de Misionología de Burgos, ha asegurado que el terrorismo del Daesh es "un cáncer" que genera "gran preocupación" entre los musulmanes pero que también "quita el sueño" al Papa Francisco y a todo el mundo.
"Tiene que quitar el sueño no solo al Papa sino a todo el mundo, pues es algo grave que no requiere solo soluciones parciales, sino radicales, específicas, que implica la colaboración de todos los sectores, desde la dimensión política, aplicando las leyes, hasta la financiera o la ética, condenando esta violencia", ha indicado Ayuso este lunes en una entrevista con Europa Press. Si bien, ha añadido que no debe cundir el "desánimo" o "el miedo" que es "el peor enemigo del diálogo interreligioso".
También ha afirmado que en la comunidad musulmana existe "una gran preocupación" por el terrorismo del Daesh que atenta en nombre del Islam y que el responsable de la Santa Sede califica como "un cáncer".
"En mis contactos con colectivos musulmanes hay una gran preocupación entre ellos, por lo que oigo, lamentación por este cáncer que ha entrado en el mundo. Los terroristas han manipulado la religión islámica", subraya Ayuso. También apunta que desde el Vaticano condenan "toda violencia" y proponen a la comunidad internacional que siga "aplicando las leyes internacionales para contrarrestar el terror".
A su juicio, "no se puede caer en el simplismo de decir, con todo lo que está pasando, que no hay que hacer diálogo". "¿Qué hacemos? ¿la guerra?", se pregunta, para responder que la solución no es la violencia sino buscar los elementos a través de los cuales se pueda proponer "respeto, amistad y colaboración".
Según indica Ayuso, en estos momentos, uno de los retos del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso y del mundo entero es condenar la violencia que existe y promover el diálogo como "un instrumento necesario para alcanzar la paz" lejos de "buenismos".
Para ello, desde este dicasterio del Vaticano realizan visitas a comunidades eclesiales y de diversas tradiciones religiosas, así como a instituciones académicas o locales para trabajar juntas el diálogo entre distintas confesiones. Ayuso ha regresado recientemente de Tokio (Japón) donde se ha reunido con asociaciones budistas para transmitirles en nombre de la Iglesia católica "la importancia del diálogo".
Además, coincidiendo con el Año de la Misericordia convocado por el Papa Francisco, han publicado un texto sobre cómo celebrar la misericordia con creyentes de otras religiones, que han enviado a todas las comunidades eclesiales.
Según explica, la educación es "fundamental" para conseguir una sociedad que brille por el "respeto" en la "diversidad", donde no exista discriminación sino entendimiento y diálogo, donde se respete la libertad de culto y de conciencia. Asimismo, enfatiza la importancia de que desde las comunidades religiosas se transmitan los auténticos valores de la fe para "evitar todo tipo de sincretismo y relativismo".
Por otro lado, Ayuso pone de manifiesto la importancia de los misioneros como eslabón en la cadena para conseguir el diálogo entre las diferentes confesiones ya que ellos se encuentran sobre el terreno y pueden facilitar el lugar de encuentro. "Algunas personas preguntan: ¿hay que hacer misión o diálogo? No una u otra sino las dos", precisa.
