ROMA 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Vaticano ha animado este jueves a cuidar el agua para proteger el futuro común en un mensaje del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes, con motivo de la Jornada Mundial del Turismo, que se celebra el próximo 27 de septiembre.
Así, bajo el título'Turismo y agua: protege nuestro futuro común', el texto recuerda que este año se celebra el 'Año Internacional de la Cooperación en la Esfera del Agua', que, en el contexto del Decenio Internacional para la Acción 'El agua, fuente de vida' (2005-2015), ha sido proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas. El objetivo de poner de relieve "que el agua es fundamental para el desarrollo sostenible, en particular para la integridad del medio ambiente y la erradicación de la pobreza y el hambre, es indispensable para la salud y el bienestar humanos y es crucial para lograr los Objetivos de Desarrollo del Milenio".
En esta línea, la Santa Sede desea unirse a esta conmemoración "consciente de la importancia que el fenómeno del turismo tiene en el momento actual, y de los retos y posibilidades que ofrece a la acción evangelizadora" porque indica que "éste es uno de los sectores económicos con un mayor y rápido crecimiento a nivel mundial".
Además, el mensaje recuerda que "para el sector turístico, el agua es de crucial importancia, un activo y un recurso" y explica que "es un activo en cuanto que la gente se siente naturalmente atraída por ella y son millones los turistas que buscan disfrutar de este elemento de la naturaleza durante sus días de descanso.
También señala que, según datos de Naciones Unidas, "en torno a 1.000 millones de personas no tienen acceso al agua potable" y añade que "los desafíos relacionados con este tema aumentarán significativamente en los próximos años, singularmente porque está mal distribuida, contaminada, desperdiciada, o se priorizan algunos usos de modo incorrecto o injusto, a lo que se unirán las consecuencias del cambio climático".
En este sentido, el documento vaticano indica que es necesaria "una mayor determinación por parte de políticos y empresarios" porque todos son conocedores de los desafíos que el problema del agua plantea pero se debe aún concretar "en compromisos vinculantes, precisos y evaluables".