La muerte de este trabajador eleva a tres los fallecidos en jornada de trabajo en lo que va de semana y a una treintena en 2008
VIGO, 23 May. (EUROPA PRESS) -
Un operario de la empresa elevadora Rama, J.A.C.M. de 37 años de edad, falleció hoy al quedar atrapado en una máquina cuando se encontraba trabajando en la carretera que sube al aeropuerto de Peinador, en Puxeiros, en la localidad de Mos (Pontevedra).
Según confirmaron a Europa Press fuentes del 112, el siniestro se produjo sobre las 10.33 horas cuando la víctima trabajaba con una máquina elevadora y, por causas que se desconocen, quedó atrapado en ella.
De este modo, Urgencias Sanitarias movilizó a una ambulancia medicalizada al lugar del siniestro, que constató que el hombre había sufrido un traumatismo torácico como consecuencia del aplastamiento, pero pese a los esfuerzos, sólo pudo certificar el fallecimiento del operario, que trabajaba en el departamento de chapa de la empresa, informaron fuentes sanitarias a Europa Press.
Al lugar del suceso se trasladaron efectivos de la Guardia Civil de Pontevedra, para recabar datos del lo ocurrido y tratar de aclarar los hechos.
TRES VÍCTIMAS.
Con este siniestro, ya son tres las víctimas mortales en accidentes laborales esta semana, después de que dos hombres falleciesen el lunes y el martes en Pontevedra y Vilagarcía de Arousa en una empresa de madera y en otra automovilística, respectivamente.
Concretamente, el lunes, un transportista de madera falleció al caérsele encima la carga de un camión en la empresa Ceferino Nogueira, ubicada en la Xunqueira del Lérez, Pontevedra.
En cuanto al segundo accidente, ocurrió el martes cuando un trabajador de la empresa automovilística Xunqueira, Carlos P.A., de 32 años de edad, falleció al cortarse en el cuello con una máquina rebarbadora de lijar.
Los siniestros laborales de esta semana elevan a una treintena el número de fallecidos en jornada de trabajo en Galicia en lo que va de año. Entre enero y abril de 2008 se produjeron en la jornada laboral un total de 26 accidentes mortales en la comunidad gallega, mientras que a estas alturas de 2007 la cifra era de 18.
