VALENCIA, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Delegación Provincial de Valencia de la Asociación Unificada de Guardias Civiles afirmó hoy que cuando se produjo el motín en la cárcel de Picassent durante la noche del martes el personal encomendado a la vigilancia exterior era muy escaso y se encontraba "por debajo de lo establecido como mínimo en el Plan de Seguridad de dicho Centro".
De hecho, afirma que en ese momento había varias patrullas pertenecientes a la Unidad de Seguridad Penitenciaria de Picassent, que se encontraban fuera del establecimiento, realizando escolta de presos trasladados hasta el Hospital General de Valencia.
Al respecto, muestra su malestar por estos hechos ya que, según recuerda, en el pasado mes de septiembre desde esta Asociación ya se criticó la situación del Centro Penitenciario de Picassent, que "se trata del mayor Centro Penitenciario de España, con una tasa de hacinamiento cercana al 200 por ciento".
Asimismo, ya advirtió de la escasez de personal de la Guardia Civil dedicada a labores de vigilancia exterior del establecimiento penitenciario, pues "constantemente se detraía personal dedicado a esta tarea para la realización de conducciones en acompañamiento de ambulancias hasta los hospitales de Valencia sobre todo; produciéndose una merma considerable de la eficacia en la seguridad de dicho establecimiento y un incremento significativo de la peligrosidad que sufren los Guardias Civiles durante el servicio".
Así, agrega que en los dos últimos años, el número de componentes de la Guardia Civila de esta Unidad, que han sido derivados para la realización de escoltas de internos en ambulancia, "ha ido aumentando gradualmente, siendo el dedicado a las labores de vigilancia exterior, casi simbólico, con el consiguiente deterioro de la seguridad". Además, señala que este personal "no percibe, como sí ocurre en otras especialidades, ningun incentivo economico ni de ningun tipo, por realizar sus cometidos en tales condiciones".
