Detenidas 13 personas por estafa a un operador de telefonía móvil, que asciende a 31.000 euros

Actualizado: lunes, 15 enero 2007 13:17

SEVILLA, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía destinados en el grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial han culminado una investigación policial iniciada en el mes de enero del pasado año con la detención de 13 personas por delitos de estafa a un conocido operador de telefonía de móvil, que denunció la realización de unas actividades fraudulentas contra ella que le estaban ocasionando un perjuicio económico de 31.000 euros.

Según informó la Policía Nacional en un comunicado remitido a Europa Press, a raíz de la denuncia del operador, los investigadores policiales analizaron las contrataciones fraudulentas detectando características similares que las interrelacionaban, como que los distintos contratantes facilitan direcciones postales y teléfonos de contacto idénticos o que la mayor parte de los contratos se realizaron en los mismos centros de distribución.

La Policía también agregó como lazos en común que en todas las líneas contratadas se generó un alto consumo en un corto espacio de tiempo; las cuentas bancarias aportadas para la domiciliación de los recibos se abrieron días antes de la fecha de activación de las líneas y cuya única finalidad era la de ser utilizadas para llevar a cabo las contrataciones denunciadas o que la mayor parte de los contratantes son personas con antecedentes policiales.

Así, la Policía consiguió identificar al "cerebro" de toda la operación, quien responde a las iniciales de José Manuel G.R., conocido con el apodo de 'Fame', quien efectuó la contratación fraudulenta de 121 líneas de telefonía móvil en la provincia de Sevilla. Este individuo ha estado detenido en cuatro ocasiones anteriores por estafa, falsificación de documentos y robo con violencia.

MODUS OPERANDI

El cerebro de la operación contactaba con personas de ambientes marginales, principalmente drogadictos, a los que en su mayor parte conocía por residir en domicilios cercanos a la vivienda de su madre, sita en la capital. Según relató la Policía, las personas captadas, dadas sus circunstancias personales accedían a realizar las contrataciones a cambio de una contraprestación económica, finalizando su participación en el momento en el que reciben la cantidad acordada a cambio de los terminales y las tarjetas SIM.

A continuación, el propio José Manuel acompañaba a las personas a cuyo nombre se iban a realizar las contrataciones a distintos distribuidores de telefonía móvil de esta localidad. Para esto, en ocasiones, se alternaba con otro hombre y su esposa a fin de no "quemarse" tras sus reiteradas visitas a los establecimientos.

Una vez en la tienda, se optaba por contratos de alto consumo que estaban especialmente bonificados por la operadora con la entrega de teléfonos de alta gama, además de sus respectivas tarjetas SIM.

Los efectos obtenidos eran vendidos a receptadores que le entregaban una cantidad por cada terminal y por cada tarjeta SIM activa, la cual era inmediatamente vendida en el mercado negro para ser utilizadas, sin cargo alguno, para el comprador hasta su bloqueo por falta de pago.

DETENIDOS

La investigación llevada a cabo por los agentes de la Policía Nacional se saldó, a lo largo de todos estos meses, con la detención del cabecilla y de una pareja más, como autores del delito, así como la de todos los contratantes de las líneas telefónicas.

Estos últimos ordenados, todos los cuales cuentan con numerosas detenciones policiales anteriores resultaron ser Rafaela M.G., de 41 años; Rafael V.S. de 40 años; Juan A. C., de 54 años; Juan Diego S.C., de 29 años; Pedro A.V., de 36 años; Miguel R.J., de 59 años; Domingo R.M. de 46 años; Aymón R.L., de 31 años; Francisco Javier R.G., de 48 años y Dolores V.M.

En fecha 10 de enero del presente año se realizó la detención de los dos últimos implicados en la estafa, un matrimonio cuya misión consistía, además de alternarse con el cabecilla de la operación en los distintos establecimientos, en actuar de intermediarios vendiendo los teléfonos y las tarjetas contratadas. Son Ángel V. G., de 39 años de edad y sin antecedentes policiales y Antonia C.M., de 40 años de edad sin detenciones policiales anteriores.

No obstante, la operación policial continúa abierta, no descartándose nuevas detenciones en los próximos días, tras haber sido identificadas otras personas implicadas en los hechos, algunas de las cuales se encuentran actualmente en centros de desintoxicación y en prisión por otras causas.