BARCELONA 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Interior muestra su "malestar" porque no se les ha tenido en cuenta en la investigación que ha iniciado la Policía Nacional sobre los presuntos casos de espionaje a políticos y personalidades realizado por la agencia de detectives Método 3, han explicado a Europa Press fuentes del departamento.
Esta decisión ha provocado indignación en el Ejecutivo de Artur Mas y temen una posible invasión competencial en materia de seguridad, según publica este lunes El Periódico.
Principalmente lamentan no haber sido invitados a la reunión de alto nivel de este lunes entre el 'número dos' de la Policía, el director adjunto operativo (DAO), Eugenio Pino, aborda y el jefe superior en Cataluña, Agustín Castro en Madrid, han indicado a Europa Press fuentes de la Consejería.
Desde el departamento aseguran que, sin embargo, siguen ofreciendo "colaboración total" con la investigación, que trata de esclarecer si hubo un espionaje político ilegal generalizado entre partidos políticos, personalidades y equipos de fútbol.
La empresa de detectives, que está en liquidación, pudo realizar centenares de informes de "contenido sensible" que incluyen a partidos como PP, PSC y CiU, así como sectores como el judicial y el deportivo.
Según fuentes conocedoras de este encuentro policial en Madrid, la reunión se enmarca en las entrevistas periódicas que Pino tiene con los distintos jefes superiores, si bien aseguran que en la conversación se va a abordar la cuestión de los espionajes.
El grupo de delitos tecnológicos de Barcelona ha abierto una investigación tras recibir la denuncia de la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, que supuestamente fue grabada por Método 3 durante un almuerzo en el restaurante La Camarga con la expareja de Jordi Pujol Ferrusola, un encargo de Método 3 que se ha atribuido al PSC, aunque el partido lo niega.
De hecho, el consejero de Interior, Ramón Espadaler, no descarta pedirle explicaciones en sede parlamentaria a Camacho por haber denunciado el caso de espionaje ilegal ante la Policía Nacional y no a los Mossos d'Esquadra.