Los detenidos en la 'Operación Atasco' actuaban en Palencia, Madrid, Toledo, Cuenca, Murcia, Valencia y Almería
MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil, en el marco de la 'Operación Atasco', ha detenido a 20 personas de nacionalidad marroquí dedicadas a sustraer placas solares valoradas en más de un millón y medio de euros, para su venta en Marruecos. Los arrestados operaban en las localidades de Palencia, Madrid, Toledo, Cuenca, Murcia, Valencia y Almería.
Según informaron hoy desde el Ministerio del Interior en un comunicado, las investigaciones se iniciaron en abril de 2007, a raíz de los robos de 238 paneles solares cometidos en los parques de energía fotovoltaica ubicados en las localidades palentinas de Marcilla de los Campos y Villaviudas.
Las primeras pesquisas permitieron determinar que los detenidos eran de nacionalidad marroquí y que formaban parte de una organización dedicada a este tipo de hechos delictivos. Los presuntos autores de los hechos residían en Madrid, Toledo, Murcia, Valencia y Almería.
Posteriormente, se descubrió que esta organización estaba dirigida por un ciudadano marroquí encargado de indicar los lugares susceptibles de realizar los robos. Una vez localizados, la Guardia Civil estableció una serie de dispositivos de investigación y vigilancia que permitieron la detención de las 20 personas.
MODUS OPERANDI
El portavoz de la división operativa de la Guardia Civil, el brigada Pastor, aseguró hoy que con esta actividad los detenidos obtenían "pingües beneficios" con la venta de placas solares sustraídas ya que el montante de los objetos robados sobrepasa el millón y medio de euros.
En declaraciones a Europa Press Televisión, indicó que la organización estaba dirigida por un ciudadano marroquí, que era el encargado de indicar los lugares susceptibles de realizar los robos.
Así, apuntó que este máximo responsable de la banda "hacía un primer reconocimiento de la zona" y tras seleccionar el lugar y momento idóneo para perpetrar los robos, generalmente lugares próximos a vías rápidas de comunicación para una mejor huida del lugar si fuese necesario, "mandaba al grupo".
Según explicó el brigada Pastor, el 'modus operandi' de la banda consistía en desplazar a un primer grupo a la zona con "una o dos furgonetas para hacer un reconocimiento" de la misma y alertar en caso de presencia policial. Seguidamente, acudía un segundo grupo compuesto por "entre cinco y ocho personas" que se encargaban de desmontar las placas solares.
En este sentido, precisó que la misma noche del robo, la furgoneta se dirigía a un determinado puerto de la costa mediterránea, donde embarcaba a Marruecos para proceder a la comercialización de las placas sustraídas "de forma clandestina".
ROBO "DIFÍCIL".
El brigada Pastor destacó lo "difícil" que es burlar los sistemas de seguridad de las zonas en las que se cometieron los robos, debido a que se han realizado en entornos rurales en los que existen "detectores de movimiento" que son capaces de alertar de la presencia de "cualquier animal".
Por último, advirtió que en lugar de atornillar las placas, es conveniente que los empresarios que trabajan con este tipo de productos procedan a soldarlas por la parte baja ya que si las intentan sustraer, al estar soldadas, "se romperán sus cristales" y esto provocará que no puedan comercializarla posteriormente.
