Fachada De La Finca De Las Quemadillas
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 12 septiembre 2012 17:45

La propia policía admitió haber cometido un error al determinar que los restos hallados en Las Quemadillas no eran de niños, sino de animales


CÓRDOBA, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -

El juez del caso de Ruth y José, José Luis Rodríguez Lainz, está a la espera de recibir un nuevo informe encargado a la Policía Científica sobre los restos óseos de la hoguera de la finca de Las Quemadillas tras los resultados del primer informe de dicho departamento que determinó que los restos eran de animales, frente a otros tres que concluyen que son de humanos. La propia Dirección de la Policía reconoció haber incurrido en un error, anunció el relevo de la experta forense que analizó los restos y abrió una investigación interna para determinar lo sucedido.

Fuentes judiciales han confirmado a Europa Press la petición del que sería ya el quinto informe que se elabora sobre la materia y recuerdan que el juez también está a la espera de recibir el informe del Instituto Nacional de Toxicología sobre el análisis para intentar hallar ADN de los niños en los restos óseos de la hoguera, motivo por el que los peritos recogieron tierra junto a dicha hoguera, además de otros utensilios.

Mientras, el juez en su último auto imputa a José Bretón, el padre de los niños, por la supuesta comisión de dos delitos de asesinato con alevosía y la agravante de parentesco, a tenor de los tres informes que concluyen que los restos óseos son de humanos.

En dicho auto, el togado argumenta que Bretón, "tras matar a sus dos hijos, lo más probablemente al llegar a la parcela", en Las Quemadillas, y sin que se pueda establecer la forma en la que lo hizo, "trató de hacer desaparecer sus cadáveres quemándolos en lo que diseñó como un auténtico horno o pira funeraria", sobre "un fondo de leña de olivo en forma más o menos rectangular", en la que supuestamente colocó "los cuerpos de los dos menores". Algo que, según el togado, está "demostrado empíricamente".

Asimismo, relata que "los cuerpos estarían posiblemente cubiertos por una sábana o cortinas de las que no se encontraron en los registros; muy probablemente José vertería importantes cantidades de gasoil sobre los cuerpos o sobre la leña, con miras a conseguir que la hoguera alcanzara elevadísimas temperaturas durante un prolongado espacio de tiempo". Cabe destacar que los agentes comprobaron en la investigación que Bretón compró unos 140 litros de gasoil antes de acudir a Córdoba el 7 de octubre.

Posteriormente, "sobre la pira, José colocaría la estructura metálica de mesa de forma rectangular que se encontró junto a la hoguera en el primer registro", y agrega que "la mesa serviría de parapeto, sobre el que posiblemente descansaría una especie de plancha o montículos que hicieran concentrar aún más el calor", con el fin de actuar, en palabras del juez, como si fuera "un horno".

Cuando Bretón calculó que "la incineración pudiera haber tenido finalmente lugar (el volumen de la ceniza y la existencia de ascuas impediría un análisis concienzudo) retiraría la mesa y el material utilizado de parapeto, consiguiendo de este modo, posiblemente con la ayuda de ropas sintéticas o simplemente por oxigenación provocada por la retirada de obstáculos, o manipulación de ascuas, que la llama se avivara en el entorno de las 17,14 horas". Precisamente, los técnicos del Infoca alertaron sobre esa hora de una columna de humo, procedente de la zona de la finca.

Al hilo de ello, el juez en su nuevo auto ha reclamado entre otras actuaciones que la Delegación Provincial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta emita un dictamen sobre la forma en la que pudo haberse producido la combustión de la hoguera, se explique la posible causa de que no se constatara su presencia por el Infoca hasta las 17,15 horas y los medios empleados para ello, el tiempo previsible y el grado de temperatura de la misma.