Padre de menor agredida sexualmente por 10 compañeros en Madrid pide que no tenga que compartir instituto con ellos

Actualizado: miércoles, 28 octubre 2009 16:45

Junto con otra compañera, fue agredida en el autobús de vuelta y, según relata, el conductor de autobús eludió ayudarlas

LOECHES, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

El padre de una menor de 12 años presuntamente agredida sexualmente, junto a otra compañera, por otros diez compañeros de su centro educativo mientras volvían en la ruta escolar entre Villalbilla y Loeches, exigió hoy que los autobuses cuenten con personal cualificado durante los viajes y que su hija no tenga que seguir compartiendo aula y ruta con sus agresores.

"Durante cuatro días se está cruzando con ellos por el instituto, pasillos y en la ruta, porque no les han echado", se lamentó en declaraciones a Europa Press el padre, José Manuel, frente a la puerta del centro, donde salían los niños en ese preciso instante, a la vez que subrayó que desconoce el protocolo de actuación en este tipo de casos, pero que la situación no puede seguir así. "Les traemos al Instituto para que reciban educación y que estén protegidos", opinó.

Los hechos ocurrieron el pasado 22 de octubre, cuando en el transcurso del viaje después de salir del centro educativo, que dura unos 20 minutos, un par de niños de 14 años comenzaron a pedir al resto de sus compañeros que agarrasen a estas dos niñas. "Las cogieron de piernas y brazos para inmovilizarlas", recordó el padre que aseguró que otros compañeros intentaron avisar al conductor, pero desistieron ante las amenazas de los cabecillas del grupo.

EL CONDUCTOR NO PARÓ EN NINGÚN MOMENTO

Finalmente, entre diez compañeros llevaron a cabo la agresión sexual a lo largo de todo el viaje, sin que el conductor parase en ningún momento el vehículo o hiciera nada por evitarlo, aunque José Manuel corroboró que "lo veía todo por los espejos".

Según este padre, la empresa justifica la emisión de socorro por parte del conductor en que no se puede parar porque "la Guardia Civil le podía denunciar". "Todo ciudadano tiene el deber de socorrer a una persona", destacó.

Además, José Manuel apuntó que la normativa vigente exige que los menores vayan acompañados de una persona cualificada durante el trayecto y opinó que el conductor no es precisamente "un revisor".

Este padre subrayó que los padres de los niños que agredieron a su hija se han puesto en contacto con ellos para expresar su vergüenza. "Se sienten avergonzados, pero al final intentan justificar a sus hijos que no se si podrán, pero yo no puedo perdonar como padre", insistió.

Ahora, su hija se encuentra "psicológicamente armada de valor", y va al colegio aunque tenga que ver diariamente a sus supuestos agresores. "Es bastante más fuerte que nosotros, porque estamos ya de psicólogo", se sinceró José Manuel, que está tomando valium y pastillas para la tensión.