El patrón del barco de Santa Pola que rescató un cayuco por segunda vez afirma que es "duro pero hay que recogerlos"

Actualizado: miércoles, 14 noviembre 2007 20:18

La embarcación ha vuelto al mar tras dejar en Malta a los cuatro inmigrantes que llevaban cinco días sin comer ni beber

SANTIAGO DE COMPOSTELA/VALENCIA, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

José Luis Sestayo, patrón del pesquero 'Nuestra Madre del Loreto' con base en Santa Pola (Alicante), que se enfrentó por segunda vez en cuatro meses a la experiencia de rescatar a inmigrantes en un cayuco a la deriva, admitió que se trata de una experiencia "dura" y que trae "complicaciones" a la embarcación, pero defendió que "hay que recogerlos".

"El problema es que nadie los quiere", lamentó Sestayo en declaraciones a Europa Press, quien relató las dificultades con las que se han encontrado en las dos ocasiones para llevar a un puerto a los inmigrantes que, en este caso, llevaban "cinco días a la deriva sin comer ni beber" en una embarcación sin motor y con una vela rota.

"En este caso, fue mejor, porque no murió nadie", admitió mientras recordaba que, precisamente, 'Nuestra Madre del Loreto' protagonizó el pasado 13 de junio el rescate de 26 inmigrantes que avistó cuando se encontraba faenando a 90 millas de la costa de Libia. Uno de ellos les murió a bordo. "Eso se te queda en la cabeza para siempre", añadió emocionado.

En este rescate, los trámites burocráticos realizados durante la mañana de ayer permitieron que pasadas las 16.30 horas de ayer, el buque alicantino pudiera desembarcar a los cuatro inmigrantes, varones procedentes de Túnez, en el Puerto de Malta.

No obstante, uno de ellos tuvo que ser trasladado a un hospital. Se trata del primero que socorrieron a las dos de la madrugada del martes que llevaba "entre dos y tres horas" intentando mantenerse a flote en el mar, después de tratar intentar asirse a una mercante que no hizo nada para rescatarlo.

Sestayo relató que fue su hermano, miembro de la tripulación, el que escuchó voces en alta mar y admitió que creyeron que se trataba de un marinero que había caído faenando en un pesquero. No obstante, una vez abordo les relató que llevaba cinco días sin rumbo en una embarcación "con la vela rota" con otros tres compañeros.

El patrón indicó que el hallazgo del cayuco fue "por casualidad como el del primer náufrago", ya que tras buscar infructuosamente alrededor del pesquero habían decidido irse. No obstante, al levantar el aparejo descubrieron la pequeña embarcación.

Tras subirlos a bordo, Sestayo dio aviso al armador del buque, José Durá, quien inmediatamente alertó a la Cofradía de Pescadores, a la Consellería de Agricultura y Pesca y al Gobierno de España. Tras los trámites burocráticos y su traslado al Puerto de Malta, el pesquero ha vuelto al mar rumbo para seguir faenando "a 90 millas del sur de Malta", precisó el patrón.

'Nuestra Madre de Loreto' tiene base en Santa Pola (Alicante), si bien la totalidad de su plantilla es gallega. Esta embarcación se dedica a la captura de quisquilla y suele permanecer en alta mar durante periodos aproximados de mes y medio.