El subdelegado de Gobierno en Lugo cree que los restos de los desaparecidos pueden encontrarse en Asturias
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
El quinto superviviente del naufragio del 'Rosamar', Luis Oliveira, será dado de alta sobre el mediodía de hoy para a continuación prestar declaración ante la Policía Judicial de la Guardia Civil de Burela y ante la titular del Juzgado de Primera Instancia de Viveiro, según aseguró a Europa Press el hijo del armador del arrastrero de litoral, Jesús Labayén.
"Hemos hablado con la Policía Judicial y la jueza de Viveiro para que agilicen al máximo los trámites", explicó después de informar que el estado del marinero portugués es "bueno" físicamente, pese a que psicológicamente todavía no se ha recuperado y desea regresar a su lugar de origen con su familia.
Así, Oliveira no comparecerá ante la Capitanía Marítima de Burela al considerar sus responsables que la versión de los hechos ofrecida el sábado por los otro cuatro náufragos que sobrevivieron coincidía. "Lo descartaron", confirmó Labayén, quien también aclaró que el ingreso del quinto marinero en el Hospital da Costa de Burela fue una "medida de precaución".
En este sentido explicó que los médicos consideraron más oportuno que, en lugar de pasar la noche en un hotel, pernoctase en la unidad de Observación del centro hospitalario de Burela.
Los otros cuatro compañeros de Oliveira regresaron a sus hogares, en Portugal, el pasado sábado tras completarse los trámites para la repatriación de los restos mortales de sus tres compañeros fallecidos.
Por su parte, el armador del buque admitió que el hundimiento del 'Rosamar' es "sin duda el peor trago" que han vivido nunca y aseguró no saber "cuándo pasará". Cuestionado por el futuro inmediato, señaló que "habrá que volver al trabajo". La empresa familiar, 'Pescarías Labayén', que gestiona junto a su padre y su hermano dispone de otros tres arrastreros de litoral.
"LA INVESTIGACIÓN CONTINÚA"
El subdelegado del Gobierno en Lugo, Jesús Otero, manifestó hoy que, pese a que una de las posibles causas del siniestro fue el enganche de las redes al fondo del mar, es preciso "seguir adelante con la investigación" y que las conclusiones se determinen "cuando la investigación acabe".
Asimismo afirmó que la localización de los cinco desaparecidos en el naufragio el pasado viernes es "imprevisible" y sugirió que sus restos podrían aparecer en la costa asturiana como sucedió en otros siniestros marítimos. Con respecto a la asistencia a los supervivientes y sus familias, el subdelegado defendió que se atendió a sus necesidades "en todo momento".
De igual modo destacó la celeridad en el proceso de identificación y repatriación de los cuerpos de los tres marineros portugueses fallecidos al considerar que los problemas burocráticos se solventaron "con absoluta rapidez" y "de la mejor manera posible". Todo a pesar de que, como apuntó Otero, el fin de semana fue "largo", una circunstancia que, a su juicio, complica la situación.
