MADRID, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
Unos 200 españoles aprenden en la actualidad chino mandarín a través del método 'Jiandan' (fácil), ideado por la empresa Macma, algunos de ellos a través de Internet.
"El método 'Jiandan' se basa en sistemas audiovisuales y en libros. El chino es un idioma muy difícil y que con sistemas poco adecuados, puede ser imposible de aprender. La base del método es el aprendizaje de los fonemas y de los sonidos chinos. Es es similar a la forma en la que los chinos aprenden su propio idioma", explicó a Europa Press la directora de Macma, María Paramés.
Así, en unas 60 horas de clase y otras 60 de estudio, el alumno puede ser capaz de mantener conversaciones breves y aprender la base del idioma hablado.
La empresa, que ofrece clases particulares o en grupo, además de servicio de traducción, de interpretación y clases de protocolo que ayudan a entender las particularidades de la cultura china, tiene servicios a domicilio, por Internet o presenciales.
ALUMNOS INTERNAUTAS.
La mayoría de los alumnos que aprende el chino mandarín a través de este método pertenece a colectivos tales como colegios, centros formativos o empresas y un cuarto de ellos son alumnos particulares. Pero, recientemente, la empresa ha comenzado con la modalidad de alumnos internautas y las previsiones apuntan a "duplicar el volumen de la empresa" en los próximos cinco meses.
"El alumno se conecta a una dirección de Internet y entra en un aula virtual en donde interactúa con un profesor que está conectado en tiempo real. De esta forma se puede dar una clase de chino con un profesor particular desde una empresa, un domicilio o cualquier lugar del mundo. El profesor y el alumno están unidos por una cámara y unos auriculares y una tecnología informática que al alumno le hace sentir que el profesor está a su lado", describió la directora de Macma.
La compañía, que comenzó su andadura en mayo de 2006, acaba de firmar una alianza con una empresa China para ofrecer cursos intensivos en China en periodos de una a cuatro semanas.
