BARCELONA, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
La teniente de alcalde de Barcelona y alcaldesa accidental, Laia Bonet, ha sostenido este jueves que se debe trabajar para mejorar la seguridad pero también su percepción, que "va más allá" de la realidad y sitúa un marco de inseguridad muy superior al real, según ella.
En una entrevista de Catalunya Rdio recogida por Europa Press, ha rechazado debatir sobre conceptos y denominaciones --como si hay o no una crisis de seguridad, como dijo el teniente de alcalde Albert Batlle--, y ha defendido que "lo más importante es si hay o no herramientas puestas en marcha ante esta realidad, y es así".
"Estamos poniendo las herramientas, y lo revertiremos", ha garantizado tras recordar el aumento previsto de efectivos de Guardia Urbana y Mossos d'Esquadra, y ha dicho que la Conselleria de Interior de la Generalitat dejó abandonada y en el olvido durante un tiempo la ciudad.
La teniente de alcalde socialista ha subrayado que la situación no está "descontrolada" --algo que demuestra el hecho de que lleguen más turistas y proyectos internacionales, según ella-- y, sobre que el 40% de la plantilla de la Urbana esté de vacaciones, ha asegurado que negociarán para que la situación no se repita el próximo verano.
AGRESIONES SEXUALES
Preguntada por los casos de agresiones sexuales --se investigan tres de los últimos días--, ha condenado los hechos y ha pedido evitar "que se instale la imagen de que son las agresiones de las fiestas de Grcia" --dos se dieron en este contexto--, porque los valores de la fiesta son opuestos a estas agresiones y promueven la cohesión social.
Sobre el 'top manta', ha remarcado que se trata de un asunto de espacio público que requiere soluciones sociales y laborales, y ha pedido no comprar sus productos para evitar "contribuir a la fragilización de un perfil de personas que llegan sin recursos y que al final caen presas de unas determinadas organizaciones, que no son otra cosa que mafias".
OPEN ARMS
Ha rechazado valorar las declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, que dijo que el Open Arms no tenía permiso para rescatar, y ha pedido no confundir el adversario: "Son el Gobierno de Italia, que cierra sus puertos, y las mafias, que estafan, utilizan y manipulan a las personas que huyen de una situación de injusticia".
Preguntada por qué permitió un pacto de comuns y socialistas en Barcelona y qué lo impide en el Gobierno central, ha destacado la importancia de trabajar la confianza, y ha resaltado que en la ciudad priorizaron un ejecutivo de izquierdas sólido centrado en Barcelona y sus problemas.
Cree que los votos de la plataforma de Manuel Valls que permitieron investir de nuevo a la alcaldesa, Ada Colau, hubieran sido incómodos si hubiera exigido determinadas condiciones, y ha opinado que el objetivo no era evitar que Ernest Maragall (ERC) fuera alcalde por ser independentista, sino que era conseguir un gobierno centrado en la ciudad, cuando Maragall buscaba "poner Barcelona al servicio de otra causa".
