La desaceleración, el Brexit o la quiebra de Thomas Cook requieren de un replanteamiento del sector
MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) ha señalado este miércoles que el nuevo Gobierno tiene la oportunidad de abordar una "ambiciosa y verdadera" apuesta en favor de la gradual
transformación turística, que "está pendiente desde hace años".
Coincidiendo con la presentación del 'Barómetro de la Rentabilidad y el Empleo', Exceltur expone 15 sugerencias de política turística tras las elecciones generales del 10 de noviembre, con el objetivo de ofrecer una serie de iniciativas para potenciar la competitividad y sostenibilidad del sector turístico en la legislatura que arranca.
Entre las propuestas de Exceltur destacan la que sugiere crear una nueva Dirección General de competitividad turística; la que plantea evitar subidas, nuevos impuestos, o tasas discriminatorias; la que propone resolver y regular definitivamente la aún "descontrolada eclosión" de las viviendas turísticas o la que expone abordar una nueva Ley de Haciendas locales que contemple por fin una financiación adecuada y estable para los municipios turísticos.
Según Exceltur, la progresiva desaceleración económica junto al resurgir de varios destinos competidores, la incertidumbre en torno al desenlace del Brexit y los efectos de la quiebra de Thomas Cook y la imagen que proyectan los altercados en Cataluña dibujan a corto plazo un escenario crecientemente complejo para el sector turístico
español que requerirá un replanteamiento y evolución de sus modelos de gestión de oferta y demanda.
15 SUGERENCIAS DIVIDIDAS EN CUATRO BLOQUES CENTRALES
El primer bloque de sugerencias de Exceltur propone dar la máxima prioridad política interna y en Bruselas para impulsar un reposicionamiento turístico español, con iniciativas como dotar al turismo del mayor rango administrativo en el Gobierno, comprometer la celebración mínima semestral de una Comisión Interministerial de Turismo, procurar una gestión mucho más proactiva de los intereses turísticos españoles en Bruselas y establecer una hoja de ruta con las administraciones.
El segundo bloque sugiere impulsar una nueva gobernanza que refuerce la capacidad de liderazgo, gestión y coordinación interadministrativa y publico privada del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y la secretaria de Estado de Turismo, a través de la creación de una nueva Dirección General de competitividad turística, la reestructuración de Turespaña o la dinamización del papel del Consejo Español de Turismo.
En el tercer bloque, proponen invertir en la capacidad de gestión de empresas e instituciones de cara al gradual y más competitivo reposicionamiento con una puesta en valor más experiencial del conjunto de la oferta turística, con iniciativas concretas como resolver y regular la aún "descontrolada eclosión" de las viviendas turísticas, promover un "Gran Plan Renove" de destinos, impulsar la formación o establecer prioridades en los obligados procesos de digitalización de los destinos turísticos.
Por último, el cuatro bloque plantea un marco legal, fiscal y financiero con políticas de inversión y gestión de infraestructuras públicas que favorezcan la mayor competitividad y sostenibilidad de los modelos y destinos turísticos, con medidas concretas como evitar subidas o nuevos impuestos, o tasas discriminatorias, asegurar la continuidad de reformas estructurales, procurar la convergencia estratégica entre el transporte de servicio público o abordar una nueva Ley de Haciendas locales que contemple una financiación adecuada y estable para los municipios turísticos.
