Ryanair señala que solo una cuarta parte de los pilotos irlandeses apoya la huelga

Aviones de Ryanair
Aviones de Ryanair - RYANAIR - Archivo
Publicado: viernes, 9 agosto 2019 18:56

DUBLÍN, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -

Ryanair ha señalado que solo el 25% de la plantilla de pilotos irlandeses ha apoyado la convocatoria de huelga propuesta en votación por el sindicato Fórsa.

Según señala la aerolínea, menos de la mitad de los pilotos irlandeses de Ryanair pertenecen a Fórsa y, de ellos, el 60% participó en la votación sobre la huelga, lo que supondría que solo el 25% de la plantilla apoya los paros.

La compañía indica que desde el pasado verano están negociando con los trabajadores y han realizado convenios colectivos sobre ascensos, traslados, antigüedad y un aumento salarial del 20% para los pilotos que no lo recibieron en 2018, además de disponer de un doble día festivo cada semana.

En su versión, Fórsa se comprometió el pasado 30 de julio a continuar con la mediación a partir del 11 de agosto con propuestas salariales concretas que "no han proporcionado ni a Ryanair ni al órgano de mediación".

Ryanair dice que Fórsa "sigue sin poder explicar qué aumento salarial busca, además del aumento del 20% ya acordado", en un momento en el que "la renuncia de pilotos se ha reducido a cero debido que están mejor pagados que los competidores", a pesar de que "los beneficios están disminuyendo debido al aumento de los costes de combustible y de la nómina".

Además, la compañía dice que Fórsa "no tiene mandato de los pilotos" y que la huelga es "inoportuna" tan solo diez semanas antes de un 'Brexit' duro, mientras que se encuentra en proceso de despedir a los pilotos "excedentes" por el retraso en las entregas de los 737 MAX, por lo que solicita que continúen con la mediación y eviten "amenazar con perturbar innecesariamente las vacaciones y los planes de viaje de los clientes".

AMENAZA DE HUELGA

Fórsa ha anunciado este viernes que los pilotos han apoyado con un 94% de los votos a favor una convocatoria de huelga para mediados de agosto si la aerolínea no acepta sus propuestas antes del lunes.

La Asociación de Pilotos de Aerolíneas Irlandesas (Ialpa) y el sindicato Fórsa reclaman desde marzo una reforma salarial que cree una estructura salarial acorde con el sector ya que la situación financiera de la compañía es "saludable" y le permite recompensar a sus pilotos.

Los casi 180 pilotos de Ryanair que trabajan directamente en Irlanda y que son miembros de Ialpa pudieron participar en la votación, si bien los empleados subcontratados no participaron en la votación. Fórsa dijo que no hará más comentarios antes de la próxima semana, a fin de dar espacio a la gerencia para responder a su reclamo.

En España, la sección sindical del sindicato español de pilotos de líneas aéreas (Sepla) en Ryanair realizará una votación entre sus afiliados para consultar si quieren realizar movilizaciones en respuesta a la amenaza de despedir a 100 pilotos que hizo la compañía este miércoles, aunque aún sin fecha.

Además, la British Airline Pilots Association (Balpa), sindicato que defiende los intereses de los pilotos británicos de Ryanair, ha convocado jornadas de huelga para el 22 y 23 de septiembre y entre el 2 y el 4 de septiembre.

IMPACTO POR EL RETRASO DE LOS 737 MAX

Ryanair ya avanzó en febrero posibles ajustes en sus bases por la evolución del negocio derivada de la incertidumbre del 'Brexit', tras incrementos más moderado que en las temporadas anteriores, y por debajo del crecimiento del 8% previsto en el conjunto de Europa, a lo que se ha añadido el impacto por el retraso en las entregas del pedido de 30 aviones 373 MAX, con el que contaba para verano y cuyas entregas están suspendidas.

Tras presentar sus cuentas, el consejero delegado de Ryanair, Michael O'Leary, anticipó en un vídeo que se verá obligada a acometer despedidos, que se aplicarán a finales de septiembre, y de nuevo tras la Navidad, tras la caída de beneficios, en el que dijo que a la compañía le sobra 500 pilotos y 400 asistentes de vuelo.

Ryanair cerró el primer trimestre de su ejercicio fiscal, finalizado el pasado 30 de junio, con un beneficio de 243 millones de euros, un 21% menos que un año antes.


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