MADRID 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha desde este lunes y hasta el domingo 8 de junio una nueva campaña de vigilancia y control de alcohol y drogas entre los conductores, cuyo principal objetivo es evitar que los usuarios que hayan ingerido sustancias se pongan al volante. Durante esa semana, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizarán más de 25.000 controles diarios, en cualquier vía, hora y día de la semana.
Con el objetivo de que esta campaña sea generalizada, la DGT ha invitado a las corporaciones locales, así como a los organismos autonómicos con competencia en la materia a sumarse a la misma e incrementar los controles y la vigilancia en sus respectivas vías.
Según la DGT, la realización de estos controles preventivos por parte de las autoridades competentes, junto con la concienciación de los ciudadanos, son dos de los factores que están contribuyendo a reducir el porcentaje de positivos preventivos de alcoholemia, pasando del 5 por ciento en 2001 al 1,7 por ciento en 2013.
Esta reducción significativa del porcentaje de positivos a alcohol, se quiere también alcanzar en el caso de las drogas, con la generalización de dichos controles en carretera. En este sentido, la DGT ha precisado que, en lo que va de año ya se han realizado más de 4.000 controles de drogas y la idea es multiplicarlo por cinco de aquí a final de año realizando otros 20.000.
Además, se pondrá especial énfasis en los colectivos policonsumidores, aquellos conductores que se ponen al volante y que consumen habitualmente alcohol y/o drogas.
DATOS PARA RECORDAR
Esta campaña llega tras la recogida de datos destacados como que el 25 por ciento de los fallecidos en carretera en Europa están relacionados con el alcohol, mientras que sólo el 1 por ciento del total de kilómetros recorridos son conducidos por personas con 0,50 gramos por litro (g/l) o más de alcohol en sangre, según datos del Observatorio Europeo para la Seguridad Vial (ERSO)
De las 100.000 pruebas de alcohol que los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizaron el año pasado a conductores implicados en un accidente, 5.131 dieron positivo a alcohol (un 5,1 por ciento). Con una tasa de alcoholemia de 1,5g/l a 2,5 g/l, en sangre el riesgo de sufrir un accidente se multiplica por 15.
Del mismo modo, la DGT recuerda que los efectos del alcohol o las drogas al volante también implican excitabilidad emocional, disminución de la agudeza mental y capacidad de juicio, euforia en el conductor, tendencia a la inhibición emocional, impulsividad, agresividad al volante o disminución de la percepción del riesgo, entre otros.
El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses en su memoria 2013 constata que de los 557 conductores fallecidos en accidente de circulación 240, es decir el 43,09 por ciento resultaron positivos en sangre a drogas y/o psicofármacos y/o alcohol. Y de estos 240, 161 (67,08%) resultaron positivos a alcohol solo o asociados a drogas y/o psicofármacos y en 85 (35,42%) de los casos se detectaron drogas solas o asociadas con alcohol y/o psicofármacos.
Entre las drogas detectadas, la cocaína, el cannabis y los opiáceos derivados de morfina fueron los más comunes.
EL CASO DE LOS PEATONES
Otro colectivo que preocupa a la DGT es el de los peatones, como usuarios más débiles de la vía. Éstos deben estar en pleno uso de sus facultades para no correr riesgos. A su juicio, la ingesta de alcohol y /o drogas supone un peligro ya que hay una menor percepción o percepción equivocada del entorno, pérdida de visión, mayor asunción de riesgos.
Por este motivo, desde el pasado 9 de mayo, día en el que entró en vigor la nueva Ley de Tráfico, los peatones que hayan cometido una infracción o estén implicados en un accidente están obligados a someterse a las pruebas de la detección de alcohol y/o drogas.