Foto: ANGEL NUÑEZ
Por Ángel Núñez
Se acerca el otoño, y con él, temperaturas agradables que permiten la práctica de diversas actividades de turismo activo por España, en este caso en la zona de Cabo de Gata (Almería), donde se encuentra el primer Parque Natural marítimo-terrestre de Andalucía, un espacio protegido que representa al sur por medio de la historia, los parajes y recursos naturales y las rocas que quedarán para el recuerdo.
Durante el camino, desde la zona central de la provincia se pueden observar las lonas blancas que cubren los huertos, y las rutas cicloturistas que también nos llevan hasta la zona San José. Con una de las franjas costeras más rica en ecología, biodiversidad y cultura, encontramos las playas y calas con mayor personalidad de la costa sur-este de España. Para admirar algunas de las joyas de este paraje natural perdido en el tiempo, será necesario andar un poco, ya que, a pesar de encontrarnos en la península ibérica, visitaremos lugares recónditos, de gran belleza e inaccesibles para un automóvil, hablamos de rutas y calas.
PLAYAS Y CALAS
Entre ellas, destacan algunas como la playa de Mónsul, donde se rodaron escenas de 'Indiana Jones y la ultima cruzada', entre otras producciones, un escenario único que también aprovechó el cantante almeriense, David Bisbal para ilustrar la canción de 'Avemaria'. Otra de las playas más visitadas es la de los Genoveses, donde se ha estado rodando el programa de Cuatro 'El Campamento'. La playa de San José quizá sea la más convencional, pero guarda el sentimiento de los pescadores del pueblo que la bautiza con su mismo nombre, adquirido previamente del castillo construido durante el siglo XVIII.
Los Escullos y sus inimitables formaciones rocosas, el Playazo, las Negras, San Miguel o la playa de los Muertos, son algunas de las playas mas bonitas de la zona. Al igual que las calas de La Rajá, la En Medio y la de Plomo, entre otras. Todas ellas se pueden visualizar al detalle en la web dedicada al Parque Natural Cabo de Gata, y cada una presenta una forma distinta, constituye un paisaje que combina el bosque desértico, la arena, las rocas y sus aguas cristalinas, adornadas con fortalezas, torres y castillos de épocas pasadas.
TURISMO ACTIVO
Este paraíso ofrece muchas propuestas para practicar turismo activo en la naturaleza, siendo el senderismo la actividad clave para recorrer y disfrutar buena parte de los caminos, formaciones rocosas, pueblos y playas, además de rutas en bicicleta de montaña o paseos inolvidables a caballo por la costa.
Por otra parte, ya dentro del agua, se puede admirar el paisaje terrestre a bordo de un velero, y practicar actividades como el snorkel, descubriendo sus fondos marinos, la fauna, la flora y también las cuevas y pozas que se integran en las formaciones rocosas, a las cuales se llega fácilmente en kayak, recorriendo la costa a golpe de remo. Recientemente tuvo lugar una concentración de piragüistas, en la que se realizó una travesía por la zona.
Para conocer algunas playas y parajes, inaccesibles por carretera, no queda otra que caminar y atravesar caminos casi desconocidos. Cabo de Gata cuenta con 18 senderos habilitados y catalogados por su dificultad y recorrido ya que puede ser alta, media y baja o circulares y lineales. Todos ellos ofrecen la posibilidad de recorrer muchas de las playas mencionadas. Se trata de un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la naturaleza.
Desde Las Negras hasta Aguamarga discurre un sendero litoral de unos diez kilómetros que pasa por la cala San Pedro, la playa del Plomo o la cala de En Medio. La Sierra Alhamilla es una zona idónea para recorrerla en bicicleta y adentrarse en un bosque de encinas, exuberante paraje donde habita una rica fauna. Otro de los recorridos más atractivos para pasar un día aventurero y con una dificultad fácil es la ruta que parte desde San José, y transcurre por senderos que nos acercan a la playa de Genoveses, a la playa del Barronal, la espectacular playa del Mónsul hasta llegar a la de la Media Luna.
En todo el recorrido encontraremos un sinfín de motivos para ser fotografiados, espectaculares vistas desde lo alto de las cordilleras, y una combinación de vegetación con suelos arcillosos, arenosos o rocosos, que no dejará indiferente a nadie. Muchos son los molinos que adornan el paisaje, además de los restos arquitectónicos de la estancia en estas tierras de fenicios y romanos, quienes las explotaron y aprovecharon sus recursos naturales.
EL FARO Y LAS SALINAS
Las Salinas, que hoy continúan activas, las encontramos antes de llegar al faro de Cabo de Gata por carretera, entre la barriada de Cabo de Gata y la cordillera montañosa, dejando de lado la kilométrica playa de San Miguel.
Son todo un ejemplo de cómo una industria, la salinera, puede colaborar en una reserva ecológica, y crean una estampa de colores de sal, que muestran el espectacular proceso. El origen de la explotación salinera puede remontarse al periodo fenicio o cartaginés, además se encuentran dos puntos de observación para contemplar a las aves, entre ellas los flamencos rosados.
El final de este recorrido termina en el faro, una visita obligada a la que se llega por una carretera de vértigo, un lugar único que ofrece imágenes inolvidables, donde se aprecia toda la fuerza de la naturaleza, y desde donde se puede observar el arrecife de las sirenas que se puede observar desde el mirador de las sirenas, situado en el punto geográfico exacto del Cabo de Gata y, por tanto, la parte más oriental del sur de España.
