La rúcula, el canónigo son variedades de primeros brotes de lechuga que hasta hace algunos años casi no conocíamos. Gracias a la aparición de las ensaladas envasadas, hay muchas variedades que se han popularizado en los hogares españoles. Su éxito va en aumento como solución sana, ligera y muy muy práctica para consumir productos frescos y de calidad. De hecho, ya son casi 13 millones los hogares españoles que consumen ensaladas frescas, lavadas, cortadas y listas para consumir. Esta tendencia al alza del consumo de ensaladas envasadas está encabezada por Florette, que cultiva sus productos íntegramente en nuestro país, y los procesa replicando a gran escala los mismos pasos que realizaríamos en casa: seleccionar, cortar, lavar y envasar. El mantenimiento del frío durante todo el proceso y el sistema exclusivo Liquid Free, que elimina la humedad de cada hoja, hacen que las ensaladas se mantengan más frescas y durante más tiempo. La cercanía entre el campo y la fábrica y la colaboración con los agricultores locales es fundamental. Florette cuenta con cultivos y centros de producción de norte a sur de nuestro país, lo que garantiza los mejores productos y el suministro diario sea cual sea la época del año. La investigación y el desarrollo de nuevos formatos tanto individuales como familiares es también clave en el ‘boom’ de las ensaladas envasadas. Y siguen evolucionando, como el caso de las ensaladas completas en bol, con todo lo necesario para comer en cualquier lugar.
