Un vecino de Gijón encuentra en la calle entre escombros correspondencia privada de Álvarez Cascos

Actualizado: domingo, 26 abril 2009 15:40

El ex ministro carga contra los responsables del PP de Gijón por su "irresponsabilidad" en la tutela de los archivos

OVIEDO, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -

Un vecino de Gijón se encontró en la calle, en medio de unos escombros, correspondencia privada del ex vicepresidente del Gobierno Francisco Álvarez Cascos, según publica hoy el diario regional La Nueva España y ha confirmado Europa Press. El vecino entregó la documentación el martes al ex senador del PP, Isidro Martínez Blanca, previa autorización del propio Cascos.

El hallazgo se produjo aproximadamente hace mes y medio, según el vecino que encontró los papeles y que prefiere no hacer pública su identidad. En declaraciones a Europa Press comentó que se encontraba esperando al autobús en un día lluvioso, mientras algunos operarios bajaban escombros y mobiliario a la calle del edificio donde el PP de Gijón tiene su sede.

Fue entonces cuando el vecino se fijó en cuatro archivadores que estaban entre el material desechado, que se encontraban en muy mal estado. Tres de las carpetas incluían actas de la Junta General del Principado, pero uno de los archivadores llevaba por título la inscripción "Correspondencia particular de Francisco Álvarez Cascos". Señaló que lo abrió y lo primero que se encontró fue una carta de Manuel Fraga Iribarne dirigida a Cascos.

El hombre, consciente del "valor histórico" de ese archivador decidió llevárselo y se subió al autobús con el mismo. Al haber estado bajo la lluvia durante tiempo, lo puso a secar en casa. Decidió entonces buscar la manera de contactar con Cascos para devolverle la documentación.

Así, el vecino relató que envió una carta a la sede nacional del PP, en la calle Génova de Madrid, pero no tuvo respuesta alguna. Posteriormente, tras comentarlo en su entorno, uno de sus amigos le dijo que conocía a Isidro Martínez Oblanca y que se lo iba a comentar. No obstante, el hombre que encontró la documentación le advierte que no va a entregar la documentación si no tiene el permiso del propio Cascos.

Así, y después de unos días recibió el 17 de abril un email del propio Francisco Álvarez Cascos, en la que le agradece que le haya buscado para devolverle esa documentación. "Su gesto le hace a Vd. merecedor de todo mi respeto y creo que le honra como ciudadano ejemplar. Muchas gracias", señala Cascos.

En su correo electrónico, Cascos añade que "solo los actuales responsables del PP de Gijón reúnen la doble condición de irresponsabilidad en la tutela del archivo del partido en el que estos documentos se encontraban, y de indignidad para enviar al contenedor de la basura el patrimonio que ni siquiera les pertenece".

De esta forma, el vecino que encontró la documentación y Isidro Martínez Oblanca conciertan una cita para el pasado martes, donde el hombre le entregó la documentación al ex senador del PP. "Hice lo que tenía que hacer y lo que espero que haga todo el mundo en la misma situación", señaló el vecino, que no quiso entrar en más detalles sobre la documentación y los remitentes de la correspondencia de Cascos.

Martínez Oblanca, que tiene ahora la documentación en su poder, confirmó todos los extremos de la versión del vecino y señaló que cuando le comunicaron que una persona había encontrado correspondencia de Cascos, pidió sus datos le comentó lo ocurrido al ex ministro de Fomento, quien decidió entonces mandarle el mencionado correo electrónico al vecino.

Martínez Oblanca explicó que en la documentación, además de con Fraga Iribarne, hay cartas con el que fuera presidente del Gobierno de la República española en el exilio, Claudio Sánchez Albornoz, además de comunicaciones con responsables municipales e incluso correspondencia de índole familiar. La correspondencia es de los años 1979 y 1980, cuando aún existía Alianza Popular. "Lo que no sabemos es lo que sucedió con el resto", apuntó.

Así, dijo que, según su experiencia, no es una práctica habitual que se tire en la calle correspondencia personal de miembros del partido. "O se devuelve a su dueño o se destruye", explicó.