MADRID, 4 Nov. (CHANCE) -
Estamos acostumbrados a gritar y castigar a los niños, algo que integra la violencia en sus vidas llevándoles a considerarla algo normal. Tenemos que aprender a educar sin chantajes ni castigos, porque si ridiculizamos a los niños, lo entienden como algo normal.
Desde 1970 se comienzan a dar casos de acoso escolar, hasta hoy en día que es un tema de plena actualidad, para evitarlo, debemos comenzar a dar una buena educación a nuestros hijos. No podemos decirles las cosas en tonos violento y evitar cosas como: "ponte a estudiar que eres un vago".
Entonces, ¿Cómo tenemos que educar a nuestros hijos? Desde Sprinter, han llevado a cabo una campaña en colaboración con Save the Children llamada #HazEquipoContraElBullying, en la que han organizado talleres para padres y madres sobre educación al respecto como herramienta frente al bullying.
Sprinter se une así a este proyecto social dando la oportunidad de hacer una donación a sus clientes en el momento de realizar una compra en la página web de la marca. Y través de estos talleres, te damos las claves para una buena educación para tus hijos y evitar así el bullying.
¿CÓMO EDUCAR A TU HIJO?
Tania García, educadora experta de EduRespeta Los puntos principales en la educación de un niño
1. Un padre siempre tiene que actuar dando ejemplo de cómo quiere que sea su hijo: "Tú tienes que ser su mayor referencia".
2. La empatía es primordial en cada momento, ponerse en el lugar de los niños teniendo en cuenta sus intereses según la edad.
3. El respeto ante todo: "Hay que respetar a nuestros hijos manteniendo los límites, pero sin confundir la libertad con el libertinaje".
4. "Para lograr comprender a nuestros hijos tenemos que escucharles de forma activa para observar cualquier señal".
5. "Hay que mantener la coherencia de nuestros actos y los que les pedimos a nuestros hijos ejerciendo como ejemplo".
6. Todo esto se consigue mediante la cohesión y la conciliación del día a día.
"El primer error es que nos han educado de manera, que la defensa es el primer ataque y no hay estudios que certifiquen el beneficio que hay en castigar, gritar o pegar". Teniendo en cuenta que todos tenemos días malos y nos pueden sacar de quicio, si yo no traspaso la línea de la violencia con mi pareja, con mis hijos tampoco.
