Una persona discapacitada no puede votar al no poder acceder con su silla en un colegio electoral

Actualizado: domingo, 22 mayo 2011 18:36

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 22 May. (EUROPA PRESS) -

Juan Antonio Cabrera, una persona con movilidad reducida, no ha podido ejercer esta mañana su derecho al voto en el colegio electoral Bethencourt y Molina de Barranco Grande, en Santa Cruz de Tenerife, al no poder acceder al interior con su silla de ruedas.

En declaraciones a Europa Press, esta persona ha explicado que un petril "insalvable" y una barandilla de protección le han imposibilitado poder entrar en el espacio donde se encontraban las mesas electorales, por lo que la única solución que se le dio fue sacar las urnas y las papeletas oportunas, a lo que se negó aludiendo que "el voto es secreto".

Si bien la policía se ofreció a cargar con la silla, Juan Antonio Cabrera desestimó esta opción por miedo a que pudieran sufrir una lesión, ya que se trata de una silla eléctrica con un peso aproximado de 80 kilos, a los que hay que sumar los 70 que pesa esta persona.

Cabrera ha lamentado que se haya tenido que ver en esta situación "a pesar de las promesas que se han hecho para que las personas discapacitadas puedan ejercer su derecho al voto".

Una vez se produjeron estos hechos, tal y como relató el propio Juan Antonio, se personó en el colegio electoral el candidato de CC a la Alcaldía de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, quien admitió que dicho colegio "no era accesible". Posteriormente llegó el concejal del distrito Suroeste, Hilario Rodríguez, que, tras comprobar la situación, dio orden para que trajeran una rampa y cortasen una parte de la barandilla que impedía el paso de la silla de ruedas.

Ahora bien, Juan Antonio Cabrera, tras estar esperando desde las 11.00 horas, siguió negándose a ejercer su derecho al voto a modo de protesta, puesto que dice no comprender "cómo no vieron antes que el colegio no era accesible para las personas con movilidad reducida, y más cuando tanto se está hablando de accesibilidad y de romper las barreras arquitectónicas", un hecho que, advirtió, puede estar produciéndose en muchos otros colegios electorales.