Junta no ve necesario cambiar la previsión económica ante el "cambio de tendencia" y destaca su pronta acción

Actualizado: martes, 9 marzo 2010 20:02

Defiende una adaptación de Andalucía al Plan de Estabilidad "distinta" a la de otras regiones con indicadores inferiores

SEVILLA, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, no vio hoy la necesidad de modificar "por el momento" las previsiones realizadas por el Ejecutivo andaluz para la economía andaluza en 2010 y destacó hoy la "celeridad y prontitud" con la que se ha actuado para paliar los efectos de la actual coyuntura económica.

En comparecencia parlamentaria, Martínez Aguayo indicó que no existen "señales" que lleven a creer que es necesaria una modificación de las previsiones económicas de la Comunidad en 2010 y aseguró que las actuaciones llevadas a cabo por la Junta han llevado a que Andalucía sufra la crisis "con menor intensidad y a que comiencen a aparecer señales de cambio de tendencia".

Así, indicó que el comienzo de 2010 fue "menos negativo" que 2009 y advirtió de que "el impacto algo diferencial de la crisis en Andalucía no es fruto de la casualidad, sino de la respuesta clara y rápida" del Gobierno. "Andalucía tiene muchas fortalezas y siempre que ha tenido un problema ha sido capaz de superarlas, y no es fruto de la improvisación sino de una planificación y de un análisis", sentenció.

Recordó que Andalucía entró oficialmente en recesión en el tercer trimestre de 2008, rompiendo el "crecimiento continuado de 15 años" y recalcó que "ninguna comunidad ha adoptado medidas de tanto calado como en Andalucía", mencionando las últimas iniciativas anunciadas referentes al proyecto 'Andalucía Sostenible', las acciones fiscales o el apoyo a los jóvenes, la construcción y las empresas.

"Los principales indicadores están comenzando a recoger señales de cambio de tendencia", insistió la consejera, que apuntó al descenso de los precios en los últimos meses, la bajada de los tipos de interés, el aumento de las matriculaciones de vehículos, la reducción de las tasas negativas en sectores como servicios o turismo y los "ligeros incrementos" en la creación de sociedades mercantiles.

En cuanto al Plan de Estabilidad, defendió una "vuelta a la senda diferente" en Andalucía conforme a otras regiones cuyo comportamiento no ha sido tan positivo como el andaluz, teniendo en cuenta el 6,7 por ciento de endeudamiento andaluz con respecto a otras comunidades con tasas cercanas al 15 por ciento.

MÁS DE 13.500 MILLONES

En este contexto, la titular de Economía detalló las medidas llevadas a cabo por la Junta de Andalucía desde el inicio de la crisis, unas iniciativas que suman un total de 13.624 millones en medidas destinadas al apoyo al empleo, a las empresas y autónomos y al impulso de la inversión pública. De dicho montante, 11.125 millones ya han sido ejecutados, lo que supone un grado de ejecución del 82 por ciento. Además, los recursos públicos movilizados equivalen al 9,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de Andalucía de 2009.

Así, Martínez Aguayo explicó que, desde febrero de 2008, la Junta adoptó un paquete de 54 medidas, de las que 20 son iniciativas de apoyo al empleo y a las familias, que han supuesto una movilización total de 2.502,3 millones de euros, entre las que se encuentran los planes 'Proteja' y 'Memta', préstamos reintegrables para viviendas, reducciones fiscales e incentivos para la compra de automóviles y motocicletas.

También, destacó 17 medidas, específicamente diseñadas para las empresas y los autónomos, con una movilización de 7.026,4 millones de euros y que incluyen actuaciones como el programa de incentivos a empresas, el programa de ayuda a empresas viables con dificultades coyunturales, los activos financieros, el Plan Empresa 24 horas, medidas orientadas a favorecer la liquidez o actuaciones orientadas al apoyo a los emprendedores.

Por último, apuntó a 17 medidas de impulso a la inversión pública de la Junta de Andalucía, con una movilización total de 4.095 millones de euros.

La consejera añadió que con estas medidas el empleo generado o mantenido previsto es de más de 160.000 puestos de trabajo y las empresas beneficiarias previstas ascienden a casi 20.000. La población que se ha beneficiado de las medidas de apoyo a las familias es cercana a los 2,3 millones.

VISIÓN "OPTIMISTA" Y "ERROR DE CÁLCULO"

Por su parte, el diputado de IULV-CA Pedro Vaquero del Pozo no compartió la visión de "moderado optimismo" de Martínez Aguayo, a quien atribuyó un "error de cálculo" al creer que la crisis era "una recesión y que iba a durar menos". "Ahora no hemos acometido el cambio de modelo y no se tendrá ahora el grado de inversión pública necesaria debido al Plan de Estabilidad", añadió.

Así, insistió en que los datos en Andalucía "caen menos que en otras regiones y que en España, pero es que el suelo estaba más cerca". "No se puede ocultar impúdicamente una realidad tan negativa con altos incrementos de paro, sentenció el parlamentario, que instó a mirar a 2010 con "realismo".

En este sentido, insistió en la necesidad de defender que Andalucía no realice recortes de acuerdo con cargo al Plan de Estabilidad similares al de otras regiones que se encuentran en "peores" circunstancias, ya que "el volver a los cuarteles de invierno de la inversión pública puede ser tremendo para Andalucía".

"AUSENCIA DE AUTOCRÍTICA"

Igualmente, el parlamentario del Grupo Popular Salvador Fuentes lamentó la "ausencia de autocrítica" de la Junta, así como "el diagnóstico conformista y la insistencia en intentar salir de la crisis sin hacer nada". "La política económica andaluza lejos de ser positiva ha sido un autentico error y despropósito", concretó.

Fuentes recalcó que el sector productivo andaluz "se cae a pedazos" y que la Junta es "incapaz de sacar adelante a la Comunidad y paliar un drama que atiza a más de un millón de andaluces". "2010 será un año muy malo y Andalucía necesita confianza, para lo que la Junta debe empezar a gobernar", advirtió el parlamentario, quien abogó por "menos ladrillos y más ordenadores, más conocimiento y menos cemento".

Por último, propuso la bajada selectiva de impuestos, "sobre todo en los sectores que más influyen en la creación de empleo", además de bajar los gastos corrientes y "terminar con el despilfarro".