SEVILLA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Empresarios de Ambulancias (Adema) ha lamentado este jueves que se continúe sin alcanzar un acuerdo en la comisión negociadora del convenio autonómico de transporte sanitario, tras una última reunión en la sede de la patronal en Antequera (Málaga).

La patronal puso sobre la mesa las dificultades económicas que afectan al sector, que ha tenido que asumir en su cuenta de resultados la subida del IVA al no ser deducible para ellos, además de la "espectacular" subida de los precios del carburante, que está llevando el margen empresarial a una situación crítica.

A pesar de ello, se ofreció a la parte social una subida del uno por ciento para el 2011 además del uno por ciento de incremento automático por razón de la antigüedad, ofrecimiento que, según ha señalado, fue rechazado de plano por los sindicatos, que insistieron en su pretensión de que se garantice una subida equivalente al incremento del IPC, mas la antigüedad.

Por la parte patronal se puso de manifiesto que, en su explotación, intervienen otros factores de producción con incrementos de precio no controlables y que, en este momento, absorbe el "escaso" margen existente en su cuenta de resultados, por lo que no pueden adquirir el compromiso de garantizar el poder adquisitivo de los salarios más el incremento de la antigüedad.

En estas circunstancias, la patronal puso el acento en que dada la situación "trágica" de los niveles de empleo actuales y la conveniencia de abordar ese problema social con "solidaridad", se compromete a eliminar los excesos de jornada que pudieran existir y aumentar el volumen de las plantillas, con la supervisión de los comités de empresas, para acometer ese tiempo de trabajo. Esta medida sería complementaria a la subida del uno por ciento para el 2011 reseñado y al incremento automático del uno por ciento de antigüedad. Si bien, ha informado de que "lamentablemente" la parte social volvió a rechazar la medida.

Como última oferta, la patronal se planteó elevar la subida al dos por ciento en 2011. A cambio de congelar la antigüedad como medida de mayor solidaridad con los trabajadores más jóvenes. Igualmente, se ofreció la posibilidad de congelar los salarios y destinar el uno por ciento del incremento ofrecido, sobre la masa salarial, íntegramente a la creación de nuevo empleo, siendo ambas propuestas rechazadas por los sindicatos, que pidieron la redacción del acta y el levantamiento de la mesa.