SEVILLA 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Delegación Provincial de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía en Sevilla ha confirmado a los padres de los alumnos afectados por el caso de la guardería infantil 'Las Tres Torres' de Sevilla Este, investigada por un juzgado por el "desajuste" experimentado entre la comida servida en los menús y el número de niños que disfrutaban de este servicio, que los menores tendrán plaza en otros centros del barrio.
Una de las madres afectadas, Inmaculada, ha explicado a Europa Press que en una reunión mantenida en las últimas horas con responsables de Planificación de la delegación, la administración ha confirmado a los padres que sus hijos tienen plazas para el próximo curso en tres centros educativos del entorno, mientras que también se ha ofrecido la posibilidad del cambio inmediato a otro centro, algo a lo que se han acogido "tres o cuatro padres".
Ello se debe, según ha explicado esta madre, a "circunstancias personales", ejemplificando en su propia hija al señalar que "para un mes que queda no queríamos darle más cambios", por lo que en este caso han recurrido a familiares, ya que la menor, al igual que casi todos los alumnos de la guardería, han abandonado el centro.
Esta situación motivó que los padres de los alumnos afectados presentaron la pasada semana ante el Juzgado de Guardia de Sevilla una demanda colectiva contra la dirección del centro a título informativo, "para poner en conocimiento del juzgado lo sucedido". De esta manera, ha sido el Juzgado de Instrucción número 7 de Sevilla el que ha abierto una investigación tras admitir a trámite la denuncia interpuesta.
Al respecto, la fiscal jefe de Sevilla, María José Segarra, a instancias de la Fiscalía de Menores --que abrió un expediente de protección de menores en torno a este caso--, decidió abrir este mismo martes diligencias de investigación por un presunto delito de malversación a la escuela infantil referida.
LOS PADRES NO DESCARTAN OTRAS MEDIDAS CONTRA LA ADMINISTRACIÓN
No obstante, y además de la referida demanda elevada a los juzgados, los padres no descartan otro tipo de medidas más adelante, en concreto contra la administración, ya que "en tres meses no hemos tenido constancia de nada y si se certificó que lo denunciado era cierto esos chiquillos se han pasado tres meses sin revisiones y comiendo lo mismo", han apuntado los padres de los niños afectados.
Por su parte, el delegado provincial de Educación ya expuso a Europa Press que la Junta tuvo constancia de este hecho en el mes de marzo, por lo que se abrió un proceso de investigación que tuvo como primera conclusión el envío a la Fiscalía por parte de la administración autonómica de informes sobre lo sucedido, en base a la comisión de un presunto delito.
Entretanto, explicó Mougán, Educación llevó a cabo un seguimiento del centro para constatar si se producía una mejoría de la situación. De hecho, subrayó que la inspección ya ejecutó un requerimiento que la dirección del centro "ha obviado", por lo que se resolvió instruir un expediente de revocación de la subvención.