Publicado 26/02/2014 15:06

Cultura.- Sara Baras llora la muerte de Paco de Lucía, "un genio que ha abierto nuestra cultura al mundo"

Paco de Lucía recibe el título de Hijo Predilecto de la Povincia de Cádiz (1997)
EUROPA PRESS/ARCHIVO/DIPUTACIÓN DE CÁDIZ

CÁDIZ, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -

La bailaora gaditana Sara Baras confiesa que ha sido "un momento horroroso" el instante en el que le han comunicado la noticia del fallecimiento de Paco de Lucía, al que considera que fue "la persona que más defendió la grandeza del flamenco, un genio que ha abierto nuestra cultura al mundo entero y que representaba las mejores virtudes de este arte, todo lo mejor del flamenco".

En declaraciones a Europa Press, Sara Baras explica que llora la muerte de Paco de Lucía "no sólo por su arte, que era grandioso, sino porque su persona era igual de grande", y añade que "por supuesto que el dolor es enorme desde el punto de vista personal, pero desde el arte el dolor es también muy intenso, porque es un genio que ha contribuido de manera inigualable a dar esa seriedad que este arte verdaderamente tiene".

"Era un orgullo para todos lo orgulloso que se sentía él del flamenco; él es el ejemplo de que el flamenco se clava directamente en el corazón, de que llega hasta el fondo y de que no tiene fronteras", indica la bailaora, que resalta que ha tenido "la suerte de compartir con él los momentos más importantes de mi carrera".

Sara Baras asegura que "siempre" ha dicho que Paco de Lucía era su "artista favorito". "Me aconsejaba mucho y desde que soy una niña, conmigo la relación siempre ha sido maravillosa, para mí Paco es lo más", apunta, al tiempo que explica que el guitarrista "en el plano personal demostraba una humildad, una cercanía y un cariño que lo hacía más grande aún, porque en el plano personal ya era lo más grande y él ya no podía tocar una música mejor porque no existe".

En este sentido, afirma que veía en él "la referencia del flamenco y una persona con esa chispa y esa cosa de la gente del sur, de Cádiz: siempre con ganas de reírse, muy divertido, buscándole constantemente una broma a las cosas, con un sentido del humor muy especial y muy de Cádiz, sin dejar de ser muy serio y profesional en su trabajo".

Para Sara Baras "hablamos de un genio que hasta para hablar era especial", y enfatiza que "su manera de hacer las cosas, con una honestidad, honradez y entrega únicas". "Para mi generación es la referencia, pero también lo será para las que vienen", asevera, aunque lamenta que "el futuro de este arte se queda sin un referente indispensable".