HUELVA, 1 Ene. (EUROPA PRESS) -
Agentes pertenecientes a la Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva han procedido a la denuncia de un vecino de Huelva como presunto autor de una infracción muy grave del Reglamento de Explosivos, independientemente de su posterior calificación como un supuesto delito de riesgo.
En el transcurso de la mañana de ayer, los agentes de la Guardia Civil que formaban parte del dispositivo establecido para tal efecto sorprendieron a una persona que se dedicaba a la venta indiscriminada de todo tipo de artificios pirotécnicos, careciendo de las correspondientes autorizaciones administrativas y utilizando para ello una furgoneta que tenía estacionada en la vía pública a la que se acercaban personas de todas las edades, incluyendo menores de edad.
En el interior de la furgoneta, que estaba estacionada en la avenida Cristóbal Colón, fueron intervenidos 2.379 artificios pirotécnicos entre petardos de gran potencia, tracas y cohetes, pertenecientes en su mayoría a la Clase III.
Este hecho ha supuesto un grave riesgo para la seguridad ciudadana, al utilizar la furgoneta a modo de almacén sin ninguna clase de control. Se da la circunstancia que el infractor es reincidente en este tipo de infracciones.
