HUELVA, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa ha aprobado a través de la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA) incentivos por valor de 135.000 euros para respaldar el proyecto de investigación que pretende poner en marcha la compañía cárnica Matadero Industrial de Cortegana (Micsa) sobre métodos de lucha contra los ácaros que afectan al jamón.
Para ello, la delegada de Innovación de la Junta en Huelva, María José Rodríguez, y el gerente de IDEA, Félix Soto, han visitado las instalaciones de la empresa radicada en la Sierra de Huelva y han tenido oportunidad de conocer el estudio que implementará la compañía para obtener métodos biológicos de lucha contra las plagas de ácaros que afectan a la producción de jamones y paletas.
De esta forma, Micsa trata de obtener un método eficaz, que tenga presente los aspectos económico, ecológico y de calidad e higiene, con el que poner fin al problema representado por la plaga de ácaros existentes en las bodegas.
La empresa invertirá un total de 320.000 euros para llevar a cabo un estudio en el que van a participar el Grupo de Neurociencia y Comportamiento de la Facultad de Biología de la Universidad de Sevilla y el Grupo de Salud Pública y Seguridad Alimentaria de la Universidad de Córdoba.
La delegada ha felicitado a los responsables de la empresa por asumir los procesos de I+D+I "como fórmula para garantizar la calidad de su producción y asegurar la competitividad de la misma en el mercado alimentario".
En este sentido, Rodríguez manifestó que iniciativas como las emprendidas por Micsa muestran la línea de trabajo que en el futuro deberán asumir las empresas de un sector de corte tradicional, como el cárnico, y resaltó que la puesta en marcha del Centro de Innovación y Tecnología del cárnico que promueve la Junta en la Sierra onubense "supondrá un auténtico revulsivo para el desarrollo de esta actividad".
Micsa, una compañía con más de medio siglo de experiencia en la actividad cárnica, arrancó su labor investigadora con la puesta en marcha, en 2003, de un proyecto centrado en el control de ácaros en secaderos y bodegas de jamones ibéricos mediante métodos físicos compatibles con el medio ambiente, iniciativa a la que quiere dar solución de continuidad a través de este nuevo estudio.
