MALAGA 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Universidad de Málaga (UMA) ha solicitado la adhesión de su Oficina de Transferencia de Resultados de la Investigación (OTRI) a la Red de Espacios Tecnológicos de Andalucía (RETA).
Esta petición tiene lugar después de que el pasado mes de junio los rectores de las nueve universidades públicas andaluzas firmaran un convenio marco con el consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Francisco Vallejo, y el presidente de RETA, Felipe Romera, para promover la incorporación de las OTRI a esta red surgida para fomentar la innovación y la modernización de las empresas andaluzas.
En los últimos tres meses han solicitado adherirse a RETA la práctica totalidad de las OTRI de Andalucía. Con ello, la Red de Espacios Tecnológicos aglutinará al conjunto del sistema de innovación de Andalucía, es decir, a todas las entidades con capacidad para generar conocimiento y desarrollo tecnológico, así como aquellas que están vinculadas con la financiación de la I+D+i, informaron hoy desde RETA en un comunicado.
En la actualidad, forman parte de esta red los ocho parques tecnológicos andaluces, 21 centros de innovación, tres centros europeos de empresas e innovación, el Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (Ifapa), la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía y la Corporación Tecnológica.
La RETA cuenta en la provincia de Málaga con tres asociados: el Parque Tecnológico de Andalucía, el Centro Andaluz de Innovación y Tecnologías de la Información y Comunicaciones (Citic) y el Bic Euronova.
Desde una perspectiva funcional, actúa a través de Agrupaciones Tecnológicas (AGT), concentraciones de empresas localizadas en parques tecnológicos y polígonos industriales en los que hay un técnico de la red que colabora directamente con los empresarios para favorecer la modernización de sus empresas a través de la I+D+i.
En el conjunto del territorio andaluz hay 19 AGT operativas y en Málaga están activas las Agrupaciones Tecnológicas del PTA, Guadalhorce y Antequera.
El trabajo de los técnicos RETA arranca "con un conocimiento preciso de su entorno empresarial, analiza las empresas de forma minuciosa para detectar las necesidades tecnológicas y proponer soluciones concretas que las hagan más modernas y competitivas", apuntaron las mismas fuentes, que añadieron que, además, determina si las empresas también tienen una oferta tecnológica susceptible de llevar al mercado.
En la provincia malagueña se han estudiado más de 200 empresas, en las que se han detectado 110 ofertas tecnológicas y 75 demandas o necesidades de incorporar tecnología.